El director médico de Ontario, el Dr. Kieran Moore, quiere poner fin a las políticas de vacunación contra el COVID-19 en el lugar de trabajo a principios del próximo mes.
Moore asegura que está revisando las cartas de instrucción enviadas el año pasado a varios sectores, incluidos hospitales e instituciones postsecundarias, que requerían que desarrollaran políticas de inmunización.
A la mayoría de los sectores se les indicó que exigieran que las personas se hicieran pruebas periódicas del virus si no estaban vacunadas, pero muchos llevaron sus políticas más allá y exigieron que todos los trabajadores se vacunaran.
Moore cree que el período de mayor riesgo de COVID-19 ha terminado y eso significa que las políticas de vacunación “ya no son necesarias”.
Él indica que idealmente se levantarían el 1 de marzo, cuando las reglas de prueba de vacunación se eliminen para los clientes en negocios y otros entornos interiores.
Moore señaló que el mandato de vacunación para los trabajadores de atención a largo plazo provino del ministro responsable de ese sector, no del director médico. Tampoco mencionó específicamente si se mantendría una política de vacunación o prueba para los empleados escolares.
Cuando se trata de enmascarar, Moore confesó que buscará tener un anuncio de esos mandatos en relación con los espacios públicos y las escuelas a mediados de marzo.
“Si hacemos la transición y cuando lo hagamos, sería un mandato para enmascarar a una recomendación para enmascarar”, afirmó Moore. “Ciertamente espero que los miembros vulnerables de nuestra comunidad que están en riesgo de contraer este virus, que tienen inmunosupresión y pacientes trasplantados en espacios públicos, continúen usando máscaras”.
