Con Ontario acercándose a seis millones de dosis únicas de vacuna COVID-19 administradas, un destacado experto en infecciones declaró que no deberíamos deshacernos rápidamente de todo el sacrificio y el arduo trabajo destinado a ayudar a detener la propagación del virus hasta la fecha.
Si bien la provincia de Ontario informó más de 3.000 nuevas infecciones por COVID-19 por segundo día consecutivo, también administró un récord de 144.724 dosis de vacuna.
El Dr. Colin Furness, epidemiólogo de la Universidad de Toronto, confesó que las vacunaciones masivas ayudaron a disminuir drásticamente la propagación en entornos de atención a largo plazo, pero que en Ontario tomará mucho más tiempo debido a problemas de políticas.
Agregó que mientras no aflojemos las restricciones en la provincia demasiado pronto y sigamos vacunando a la mayor cantidad de personas posible, la provincia puede esperar ver una fuerte disminución de los casos, posiblemente a finales de mes.
“La vacunación va a funcionar, está funcionando en los Estados Unidos en la disminución de casos, aunque tampoco están siendo muy responsables. Simplemente está tardando mucho más”, sostuvo Furness.
El jueves, la Dra. Barbara Yaffe, oficial médica asociada de salud de Ontario, aseguró que se sorprendería si la economía se reabre por completo cuando se levante la orden actual de la provincia de quedarse en casa el 20 de mayo.
Ella señala que, si bien el número diario de casos de COVID-19 está disminuyendo, los hospitales aún enfrentan serios problemas de capacidad.
«Todo lo que esté planeado, con suerte, se hará de manera muy gradual y lenta», añadió. «No queremos una cuatra ola».
