La Unión Canadiense de Empleados Públicos (CUPE) afirmó hoy que 55,000 de sus miembros que trabajan como bibliotecarios, técnicos y asistentes de educación se unirán al paro programado por las escuelas públicas de Ontario a partir de mañana lunes.
Las conversaciones contractuales entre el sindicato y la provincia se rompieron el mes pasado.
Por su parte, el ministro de Educación, Stephen Lecce, dijo a los medios que CUPE, que representa a 55,000 trabajadores de oficina y educadores de primaria, había aceptado una oferta gubernamental de nuevas fechas de mediación y las conversaciones podrían reanudarse esta semana. CUPE está esperando saber sobre esas fechas y dice que no ha recibido aviso.
El sindicato, dijo en una conferencia de prensa que los estudiantes están en condiciones inseguras. «El único caos que se ha creado en el sistema son los recortes del gobierno provincial», dice Fred Hahn, presidente de CUPE Ontario.
Los trabajadores dejaron de limpiar los pasillos y vaciaron los botes de basura fuera de las escuelas, los empleados de oficina dejaron de encontrar reemplazos para el personal ausente y los trabajadores de educación dejaron de trabajar horas extras.
La Junta Escolar del Distrito de Thames Valley respondió a las noticias el miércoles con un comunicado.
«Continuamos evaluando la situación y brindaremos actualizaciones relacionadas con las operaciones de las escuelas a medida que estén disponibles. En este momento, los padres y tutores deberían considerar arreglos alternativos para el cuidado de los niños para la próxima semana, ya que la decisión sobre el cierre de las escuelas aún no se ha determinado. Las escuelas permanecen abiertas durante el resto de esta semana «.
En una actualización posterior, la junta dijo que una decisión sobre el cierre de las escuelas se tomará el viernes y se comunicará directamente al personal y los estudiantes.
Alientan a las familias a comenzar a considerar arreglos alternativos de cuidado infantil a partir de mañana 7 de octubre.
