Mientras Ontario se prepara para un segundo bloqueo en el Boxing Day, las pequeñas empresas buscan alternativas para sobrevivir ante este duro golpe de la pandemia.
Muchos han quebrado, otros pueden no superar este bloqueo y otros están colgando de un hilo.
La lucha contra los cierres, el tráfico peatonal cero y los despidos ha llevado a muchas pequeñas empresas a aumentar su presencia en línea, donde los clientes también han migrado para comprar de todo, desde regalos de Navidad hasta papel higiénico.
La innovación es el nombre del juego para mantenerse a flote y algunas empresas y emprendedores locales han recurrido a Instagram para hacer precisamente eso.
Conexión comunitaria
Si bien el uso de Instagram ha ayudado a lanzar o mantener los negocios a flote, los dueños de estos lugares dicen que un resultado feliz de la decisión de usar la plataforma de esta manera ha sido las conexiones que han hecho y las comunidades que han construido.
Los primeros días fueron de total incertidumbre, donde la necesidad de generar conexión con los clientes, fue el motor que impulsó el incursionar en estos canales digitales para cientos de emprendedores.
Las plataformas digitales no solo les permite vender, sino también conocer mucho más a sus clientes y viceversa, creando un lazo inquebrantable.
