Por primera vez en años guardamos nuestras maletas. Se cancelaron vuelos. El calendario compartido de Google para monitorear los viajes del otro está vacío para el futuro cercano.
Para mi esposo y para mí, viajar ha sido una constante en casi más de una década juntos. Para mí eran largos viajes a varios países con presidentes estadounidenses a bordo del Air Force One y semanas en otros estados. Él de lunes a jueves hacía viajes de consultoría y, de forma más reciente, viajes rápidos a la sede de su nuevo empleador en Londres.
Con frecuencia es estresante y, casi al mismo ritmo, estimulante. Las maletas en el piso del cuarto estaban medio desempacadas, medio empacadas, ante la expectativa de descubrir un nuevo destino o regresar a un lugar conocido. Los viajes de negocios ofrecían la posibilidad de encontrar un lugar al que vale la pena regresar algún día sólo por diversión.El mundo parecía pequeño, accesible, y sé lo privilegiados que éramos de sentirlo así.
Ahora, esos lugares parecen muy lejanos, muy fuera del alcance. Y lo son de forma bastante literal, al haberse extendido las órdenes de quedarse en casa y la suspensión todos los viajes con excepción de los esenciales, mientras el mundo batalla para controlar la propagación del veloz coronavirus.
Para nosotros, al principio los cambios fueron lentos. El viaje de mi esposo a San Francisco se canceló cuando el norte de California lidiaba con un brote. Luego se canceló la conferencia SXSW en Austin, Texas, que atrae a cientos de miles de personas al año.
Todavía estudiaba el calendario de las primarias presidenciales demócratas en busca del siguiente estado al cual viajar para escribir un artículo. Pero esos estados seguían posponiendo sus contiendas, hasta que no quedó nada en el horizonte.
Ahora nuestro mundo en realidad es pequeño, centrado alrededor de nuestra compacta casa urbana con su pequeño jardín trasero.
La nuestra para nada es una historia de adversidad, sobre todo en una época en que tantas personas en el mundo están enfermas y muchas más se enfrentan a dificultades económicas. Nosotros tenemos nuestros trabajos, y nuestro congelador y alacena bien abastecidos. Trabajar desde casa nos permite pasar más tiempo con nuestro hijo de 2 años y nuestro perro deseoso de atención. Reconocemos lo afortunados que somos.
Pero, a unas semanas de esta nueva realidad, me doy cuenta de que añoro al mundo. Ningún lugar en particular, simplemente la capacidad de estar en él.
Vicktery Zimmerman trabajando desde su casa de Chicago el 27 de marzo del 2020. Mujer extrovertida, dice que sufre mucho con el encierro por el coronavirus. Para los introvertidos, en cambio, el confinamiento no representa problema alguno. Por el contrario, les evita tener que estar buscando excusas para no verse con la gente.
En cuestión de días Vicktery Zimmerman había aprendido a conectarse con amigos y familiares a pesar de que ella y su marido estaban confinados en su casa de Chicago.
Están las llamadas con FaceTime. Ya arregló para ver una película con una pareja amiga (a la distancia, desde ya). Planea organizar juegos a través de la internet. Lo que sea para que esta mujer de 30 años especialista en relaciones públicas y altamente extrovertida pueda seguir funcionando, como dice ella.
A su esposo Justin Zimmerman, de 32 años, todo esto le resulta desconcertante.
“Ahora todo el mundo nos llama a cada rato para decirnos ‘hola’”, comentó entre risas este estudiante para un doctorado. “Yo pienso, ‘no tienen que hacer eso realmente’”.
El encierro para evitar la propagación del coronavirus ha alterado muchas normas, incluidas la de salir de la casa, reunirse con amigos y tener contactos sociales constantes, con el empleado del bar de la esquina y el vendedor de la tienda de comestibles, por ejemplo.
Pero incluso antes de la pandemia, había gente a la que todas estas cosas les resultaba una carga más que un placer: Los introvertidos, que están bien consigo mismos y son selectivos en sus contactos con la gente.
Las cuarentenas y el distanciamiento social cambiaron todo. En cierto sentido, son un alivio para quienes ahora no tienen que buscar excusas para no salir de su casa y un suplicio para los extrovertidos que necesitan el contacto con otros.
Eric Bellmore, un extrovertido, le gritó un saludo a alguien con quien se cruzó de lejos mientras corría por un parque cerca de su casa.
“Es sorprendente lo importante que es para mí estar con otros”, expresó Bellmore, de 47 años, que trabaja en tecnología de la información en Mount Pleasant, Michigan.
“Los otros días mi esposa me dijo: ‘Para alguien como tú, esto debe ser una pesadilla’”.
No para David Choi, músico de Los Ángeles de 34 años muy introvertido a pesar de que su profesión le exige hacer contactos y estar con gente.
La cuarentena, comentó, “te da una excusa para permanecer en tu casa, que es lo que quería hacer para empezar”.
En términos generales, los extrovertidos siempre han sido bien vistos y los introvertidos son considerados medio extraños, según Lisa Kaenzig, la extrovertida decana del William Smith College.
Dice que ha estudiado a los estudiantes introvertidos por años, pero que el coronavirus cambió muchas de sus impresiones.
Si bien todo el mundo siente ansiedad y alarma por el virus, la orden de confinamiento que limita el contacto social ha sido una buena noticia para los introvertidos con los que habló.
“El mundo es un lugar más apacible para ellos en estos momentos. Se adaptan mucho más rápido”, manifestó.
Un introvertido con el que habló sufría pensando en que algún día se acabará la cuarentena y tendrá que volver a entrar en contacto con la gente. Y con un montón de extrovertidos que sentirán el impulso de dar abrazos después del encierro.
Algunos introvertidos, no obstante, extrañan rituales como sentarse en un café.
A Jackie Aina le gusta hacerlo para romper un poco la monotonía de trabajar desde su casa. Es una maquilladora que crea contenido para la internet y trabaja mayormente en casa.
“Ir al café es un buen cambio de ambiente. Me gusta sentarme y ver lo que pasa a mi alrededor”, dijo Aina, de 32 años, de Los Ángeles. “Ahora ya no puedo controlar eso. No depende de mí la decisión de quedarme en casa”.
La presencia de introvertidos y extrovertidos en una casa ahora que deben permanecer encerrados plantea el desafío de aprender a convivir.
Los extrovertidos encuentran la forma de hacer muchas cosas a la distancia. Videollamadas relacionadas con el trabajo o los estudios, o incluso para charlar durante el almuerzo. Contactos permanentes con los seres queridos a través del telé
Jackie Hardt, de 34 años, de Buffalo, estado de Nueva York, está usando videollamadas para tomarse un café o almorzar con amigos. Cuenta que su esposo, un introvertido, no le ve ningún sentido a eso.
“A él le costaría mucho compartir un trago o un café en forma virtual”, expresó. “Él no tiene problema alguno si no ve a sus amigos hasta que esto se termine. A mí me costará mucho más”.
El canciller venezolano, Jorge Arreaza, rechazó este martes la propuesta de «un gobierno de transición» realizada por el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, y recalcó que «las decisiones en Venezuela se toman en Caracas, en el Palacio de Miraflores y bajo la Constitución».
Arreaza enfatizó que Venezuela no aceptará tutelajes ni de Washington ni de otra capital. «Ellos pierden el tiempo en su laberinto», dijo en entrevista con la cadena radial colombiana, Blu Radio.
El canciller de Venezuela agregó que el Ejecutivo no discutirá la propuesta estadounidense. «La oposición y el gobierno tenemos acercamientos diarios y cualquier propuesta que surja en las mesas de diálogo se van a estudiar siempre y cuando se apeguen a las leyes venezolanas», apuntó.Arreaza enfatizó que el gobierno venezolano desea tener buenas relaciones bilaterales con EE.UU., pero lamentó que el presidente Donald Trump y su Administración tengan «una obsesión con hacer cumplir su voluntad en Venezuela y retomar el control del petróleo y las riquezas venezolanas».
«Si algún día ellos quieren respetar a Venezuela, pues bienvenido ese respeto, nosotros los respetaremos a ellos. Hasta tanto eso ocurra, las relaciones son de tensión y de defensa de nuestra soberanía», manifestó Arreaza, quien reiteró que no hay «ninguna» probabilidad de que el presidente Nicolás Maduro abandone el gobierno.
«Fue electo en 2018 para un periodo de 6 años, la única figura que contempla la Constitución es que la oposición activara un referendo revocatorio a la mitad del mandato. Seguirá adelante hasta que la Constitución lo señale», finalizó.
Por último, Arreaza manifestó que Venezuela no considerará la propuesta de Pompeo, especialmente el apartado de condicionar el levantamiento de las sanciones a la instauración de un gobierno de «transición». «Resulta que nosotros no somos peces ni ningún animal marino, las sanciones son ilegales y ellos tienen que levantarlas y deberían hacerlo de inmediato ante la situación de pandemia. Pero nuestra soberanía no está en negociación».
La postura de Venezuela fue reiterada minutos después a través de un comunicado oficial emitido por la Cancillería de la nación.
Más temprano, el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, presentó una propuesta para formar un «gobierno de transición» en Venezuela, en el que tanto el presidente Nicolás Maduro como el diputado opositor Juan Guaidó no estarían incluidos.
El funcionario habló de lo que denominó el ‘Marco Democrático para Venezuela’, que contemplaría la conformación de un Consejo de Estado, que gobernaría hasta las elecciones presidenciales y legislativas, a finales de 2020.
Según la propuesta de Washington, el Consejo de Estado estaría conformado por cinco miembros, tanto del partido de Gobierno como de los opositores liderados por Guaidó, que son parte de la Asamblea Nacional del país suramericano.
La FIFA reconoció el martes que tiene un “deber” de usar sus vastas reservas financieras para salir al auxilio de una industria del fútbol arrasada por la pandemia de coronavirus que no permite jugar partidos y súbitamente ha golpeado la economía del deporte más grande en el mundo.
El COVID-19 ha impactado incluso a los clubes más ricos. Los jugadores del Barcelona y la Juventus han aceptado recortes de sus salarios.
También ha golpeado a los países más pequeños.
_La asociación uruguaya puso en licencia laboral a todos sus cuerpos técnicos, incluyendo al seleccionador absoluto Oscar Tabárez.
_La federación ecuatoriana decidió ajustar la compensación de los cuerpos técnicos, elaborar un nuevo presupuesto frente a la “nueva realidad” y modificar los formatos y calendario de sus competiciones.
_Y en Eslovaquia, el campeón Zilina se declaró en bancarrota.
Al haber amasado reservas que recientemente se supo alcanzaban los 2.745 millones de dólares, la FIFA cuenta con los recursos para asistir financieramente al deporte en diversos aspectos.
Ahora, la entidad rectora del fútbol mundial busca demostrar la importancia de acumular tantas reservas. Brindó más detalles sobre la necesidad planteada hace dos semanas por el presidente de la FIFA Gianni Infantino y sus vicepresidentes de dar un “fondo de apoyo” al deporte.
“La FIFA se encuentra en situación financiera fuerte y es nuestro deber hacer lo “máximo posible” para ayudarles en su momento de necesidad”, dijo la entidad en una declaración enviada a The Associated Press el martes.
Jonas Baer-Hoffmann, quien representa a los 65.000 jugadores agremiados en el sindicato FIFPro, dijo que los esfuerzos de la FIFA deben enfocarse en los grupos más vulnerables de los mercados más pequeños del fútbol.
“Hay diferentes grados de urgencia… Necesitamos salvaguardar a las partes más débiles de esta pirámide”, enfatizó Baer-Hoffman. “Veremos a muchos individuos cuyas vidas dependen de estos clubes más pequeños… Una vez que estos clubes se vayan, no los recuperaremos”.
Incluso en la elite del fútbol, recortes inimaginables hace un mes se están implementando.
El Tottenham, que llegó a la final más reciente de la Liga de Campeones, anunció el martes que 550 empleados, ajenos al plantel deportivo, verán reducido en 20% su salario durante los próximos dos meses o recibirán vacaciones sin paga, bajo un programa gubernamental para salvaguardar empleos.
En este marco, la FIFA afirmó que busca ayudar.
“La FIFA trabaja en alternativas para brindar asistencias a la comunidad del fútbol mundial tras hacer un análisis a fondo del impacto financiero que esta pandemia tendrá en el fútbol”, añadió.
Una de las opciones a explorar es un mecanismo para ofrecer una inyección monetaria a la industria del fútbol con las seis confederaciones regionales y las asociaciones miembros para asegurar que se tendrá un anuncio “en el futuro cercano”.
“La comunidad del fútbol en todo el mundo sufre, con una gravedad alta o menor, serios problemas financieros por el brote de coronavirus”, dijo la FIFA. “Esto amenaza con alterar y afectar las operaciones de las asociaciones miembro y otras organizaciones de fútbol como las ligas y clubes para desarrollar, financiar y organizar actividades de fútbol en todos los niveles del deporte, incluyendo el profesional, el aficionado, los juveniles y las bases”.
“Se anticipa que en muchas partes del mundo un número considerable de personas involucradas en el fútbol, incluyendo a futbolistas de ambos sexos se vean en una muy difícil situación económica”, agregó.
La FIFA cuenta con el denominado programa “Forward” para redistribuir su riqueza a las asociaciones miembro. En el ciclo 2015-18, la inversión en el programa alcanzó los 1.079 millones de dólares, con 832 millones asignados a las asociaciones miembros y confederaciones, según los últimos informes financieros que fueron publicados.
Los relojes con la cuenta regresiva de los Juegos Olímpicos vuelven a hacer su tic-tac tras ser reajustados con las nuevas fechas.
El modelo instalado afuera de la Estación de Tokio y otras en la capital japonesa cambiaron casi de inmediato tras la confirmación de las nuevas fechas, del 23 de julio al 8 de agosto de 2021.
Los relojes mostraron 479 días este martes. Parece ser una fecha muy distante, pero pequeña e insignificante al compararse con las consecuencias del coronavirus en el planeta.
Igual no queda mucho tiempo para volver a montar la primera justa olímpica que se pospone desde el inicio de la era moderna de los Juegos, hace 124 juegos. Tampoco para los 11.000 deportistas olímpicos y los 4.400 de los Paraolímpicos, al igual que para los patrocinadores y encargados de la producción televisiva. Y todos esos fanáticos que habían adquirido boletos. Qué decir de los organizadores y los contribuyentes en Japón que han gastado miles de millones y que ahora tendrán que desembolsar más.“Creo que estos Juegos Olímpicos tendrá un enorme significado histórico”, dijo Yoshiro Mori, el presidente del comité organizador tras el anuncio de las nuevas fechas.
Mori, de 82 años y ex primer ministro de Japón, también recordó que no hay una garantía de que la pandemia del coronavirus esté bajo control dentro de un año. Ello incluye las nuevas fechas de los Paraolímpicos, que quedaron programados entre el 24 de agosto y el 5 de septiembre.
“Esta es una plegaria que hacemos y realmente creo que alguien escuchará nuestras plegarias”, dijo Mori.
Después de tantearse unos Juegos en la primavera, las nuevas fechas de verano son idénticas a las que se fijaron para 2020. Los organizadores esperan que los viejos planes puedan adaptarse al cambio, manteniendo las mismas sedes, no perder las habitaciones de la Villa Olímpica, movilizar los mismos voluntarios y permitir que la gente que compró boletos pueda mantenerlos.
Las nuevas fechas también esquivan entrar en conflicto con el apretado calendario deportivo en Norteamérica y Europa. Pero el verano en Tokio implica calor y humedad agobiantes, lo que era la mayor preocupación de los organizadores antes de la pandemia.
Muto dijo que los organizadores no han recibido notificación de alguna de sus arenas o predios, advirtiéndoles que no podrán montar una competencia en sus instalaciones el año próximo.
“Son varias sedes que aún no pueden tomar una decisión. Se tendrá que negociar con ellos”, dijo Muto. “Si tenemos que hacer un cambio de sede, entonces habrá que ajustar el calendario de competencia también”.
David Wallechinsky, el presidente de la Sociedad Internacional de Historiadores Olímpicos, dijo que los Juegos en 2021 — retendrán el nombre oficial de Tokio 2020 — podrán ser un símbolo de un mundo repuesto tras la pandemia.
“Yo veo esta posposición como una oportunidad para el Movimiento Olímpico, en vez de paso atrás”, dijo en un correo electrónico enviado a la The Associated Press.
Comentó que una cancelación, en vez de posponer, no era posible.
“Desde un punto de vista financiera, la cancelación no era una alternativa viable”, dijo. “Las repercusiones hubieran sido complejas y enormes”.
En esta foto del 5 de marzo del 2020, el príncipe Enrique de Inglaterra y Meghan, duquesa de Sussex, llegan a la ceremonia anual de los Endeavour Fund Awards en Londres
El príncipe Enrique y su esposa Meghan comenzaron el martes oficialmente su transición de miembros de alto rango de la familia real británica a, bueno, algo que no está muy claro de momento. ¿Celebridades internacionales? ¿Patrocinadores de la caridad? ¿Influenciadores globales?
El cisma real que la pareja desató en enero al anunciar que se retiraría de sus deberes oficiales, renunciaría a los fondos públicos, buscaría su independencia financiera y se mudaría de Inglaterra a Norteamérica se hizo oficial el 31 de marzo.
La mudanza se ha vuelto más complicada y dolorosa por la pandemia global del coronavirus, que encontró a Enrique, Meghan y su hijo Archie de 10 meses en California, lejos del padre de Enrique, el príncipe Carlos — quien se recupera tras haber dado positivo al COVID-19 — y su abuela de 93, la reina Isabel II.“Hay un sentimiento común a todos, de que el mundo en este momento parece extraordinariamente frágil”, dijo la pareja en un último post el lunes en su ahora desactivada cuenta de Instagram SussexRoyal.
“Lo más importante ahora es la salud y el bienestar de todos alrededor del planeta y de encontrar soluciones para los muchos problemas que se han presentado como resultado de esta pandemia”, agregaron. “Mientras todos encontramos el papel que vamos a desempeñar en este cambio global y cambio de hábitos, nos enfocamos en este nuevo capítulo para entender cómo podemos contribuir mejor”.
Han pasado menos de dos años desde que el exsoldado Enrique, el sexto en la línea de sucesión al trono británico, se casó con la actriz estadounidense Meghan Markle en el Castillo de Windsor en una fastuosa ceremonia vista por millones alrededor del mundo.
Pronto la pareja comenzó a irritarse con la vigilancia implacable a la que era sometida por la prensa británica — a la que acusaron de incurrir en el acoso. Decidieron librarse en lo que Enrique llamó un “acto de fe” y buscar una vida más tranquila, sin los periodistas que han filmado, fotografiado y escrito sobre él desde el día de su nacimiento.
Por años, Enrique ha tenido una relación incómoda con la prensa, a la que culpa de la muerte de su madre, la princesa Diana, fallecida en un accidente automovilístico en París en 1997 mientras era perseguida por paparazzi.
La infelicidad de Enrique se incrementó luego que comenzó a salir con Markle, entonces protagonista de la serie de TV “Suits”. En 2016 acusó a los medios de acosar a su entonces novia, y criticó los “matices raciales” de algunos sobre la actriz birracial.
Es claro que el estilo californiano optimista de Meghan — personificado en las imágenes lustrosas y mensajes positivos en la cuenta de la pareja en Instagram — le molestaba a sectores de la prensa sensacionalista británica, tan insaciable de noticias de la realeza como ferozmente crítica de sus miembros de la familia.
La pareja — que conserva sus títulos de duque y duquesa de Sussex, pero ya no se harán llamar Su Alteza Real — esperaba seguir usando la marca Sussex Royal en su nueva vida. Pero el mes pasado anunciaron que no buscarán registrar el término debido a reglas británicas sobre el uso de la palabra “royal” (real).
La pareja planea lanzar una organización sin ánimo de lucro para sus actividades benéficas en áreas que incluyen el empoderamiento juvenil, la salud mental, la conservación, la igualdad de género y la educación. Enrique también continuará supervisando los Juegos Invictus, la competencia estilo Juegos Olímpicos que fundó para soldados heridos.
Meghan ha sido anunciada como la narradora de “Elephant”, un documental de Disney sobre la naturaleza.
Pero por ahora, la oficina de la pareja dijo que ésta desea que el mundo se enfoque “en la respuesta global al COVID-19”.
“El duque y la duquesa de Sussex pasarán los próximos meses enfocados en su familia y continuarán haciendo lo que puedan, de manera segura y en privado, para apoyar y trabajar con sus compromisos caritativos preexistentes mientras desarrollan su futura organización no lucrativa”, dijo la oficina de la pareja en un comunicado.
Los recién independizados Enrique y Meghan también necesitarán ganar dinero para ayudar a pagar sus cuentas multimillonarias de seguridad.
Como altos miembros de la realeza, han tenido guardaespaldas financiados por los contribuyentes británicos. Desde el año pasado, Enrique y Meghan han tenido su sede en Vancouver Island, Canadá, donde la seguridad era proporcionada por la Real Policía Montada Canadiense. Las autoridades canadienses advirtieron el mes pasado que eso acabará una vez que la pareja deje de trabajar como realeza.
El duque y la duquesa recientemente se mudaron al área de Los Ángeles, donde Meghan creció y donde su madre aún vive. La noticia llevó al presidente Donald Trump a tuitear el domingo: “Estados Unidos no pagará por su protección de seguridad. ¡Ellos deben pagar!”
La oficina de Enrique y Meghan dijo que “los costos de seguridad están siendo cubiertos personalmente por la pareja”.
Algunos historiadores de la realeza advirtieron que Enrique y Meghan podrían tener problemas para encontrar un papel gratificante que desempeñar. Su caso ha sido comparado con el del rey Eduardo VIII, quien abdicó en 1936 para casarse con la divorciada estadounidense Wallis Simpson. La pareja vivió el resto de sus vidas en un exilio autoimpuesto lujoso pero solitario.
La historiadora real Penny Junor dijo que los miembros de la realza en Gran Bretaña estaban ayudando a elevar la moral de la nación durante la pandemia del coronavirus. La reina ha emitido un mensaje para la nación, mientras que el hermano de Enrique, el príncipe Guillermo y sus hijos, se unieron para aplaudir públicamente el trabajo de los trabajadores de la salud.
“Todo esto es absolutamente de lo que se trata esta familia, y esos miembros de la familia real que está en un limbo ahora son bastante irrelevantes”, dijo Junor.
El presidente Donald Trump llega a una conferencia en la sala de prensa James Brady, en Washington
El presidente Donald Trump advirtió el martes a los estadounidenses que se preparen para “un par de semanas infernales” mientras la Casa Blanca dio a conocer nuevos pronósticos que indican que podría haber entre 100.000 y 240.000 decesos en el país por la pandemia de coronavirus, incluso si se mantienen las directrices actuales de distanciamiento social.
Las autoridades de salud pública resaltaron que la cifra podría ser menor si las personas de todo el país acatan las normas de distanciamiento.
“Realmente creemos que podemos tener mucho mejores resultados”, dijo la doctora Deborah Birx, coordinadora del grupo de trabajo de la Casa Blanca contra el coronavirus. Eso requeriría que todos los habitantes tomen en serio su papel para evitar la propagación de la enfermedad, añadió.El doctor Anthony Fauci, el principal experto en enfermedades infecciosas del gobierno, agregó que “es una cifra que debemos prever, pero no necesariamente debemos aceptarla como inevitable”.
Trump dijo que cumplir con las directrices de su gobierno era una “cuestión de vida o muerte” para la población y pronosticó que el país vería pronto “la luz al final del túnel” en una pandemia que ha cobrado la vida de más de 3.500 estadounidenses e infectado a 170.000 más.
“Quiero que todo estadounidense esté preparado para los complicados días por venir”, dijo Trump.
“Estas serán unas de las peores dos o tres semanas que hemos tenido en la historia del país”, añadió el mandatario. “Vamos a perder a miles de personas”.
Los sorprendentes pronósticos se difundieron durante un sombrío informe de dos horas en la Casa Blanca. Las autoridades describieron un número de víctimas que, en el cálculo más optimista, superaría a las más de 53.000 vidas estadounidenses que se perdieron durante la Primera Guerra Mundial. Y el extremo superior del cálculo sería casi equivalente a las 291.000 vidas que perdió Estados Unidos en combate durante la Segunda Guerra Mundial.
“No hay una varita mágica”, dijo Birx. “No existe una terapia o vacuna mágica. Son sólo comportamientos. Cada uno de nuestros comportamientos, convirtiéndose en algo que cambia la trayectoria de esta pandemia viral”.
Fauci describió las cifras como “aleccionadoras” e instó al público a “pisar el acelerador” en sus labores colectivas de contención.
“Seguimos viendo una línea ascendente”, declaró Fauci. “No podemos desalentarnos por ello, porque la mitigación está funcionando y funcionará”.Birx comentó que los pronósticos pandémicos iniciales eran de entre 1,5 y 2,2 millones de fallecimientos en Estados Unidos. Pero ese era el peor de los escenarios, sin medidas para frenar la propagación del virus mediante el distanciamiento social. Añadió que las entidades en las que no se ha disparado el número de infecciones como en Nueva York podrían implementar acciones para aplanar la curva de hospitalizaciones y decesos.
No sólo el distanciamiento social podría marcar una diferencia, sino también los preparativos de los hospitales de todo el país para la llegada de una gran cantidad de pacientes sumamente enfermos. Mientras mejor preparados estén los hospitales, hay mayores probabilidades de que se salven vidas.
También existe un comodín en cuestiones de tratamiento: la posibilidad de que la combinación de fármacos experimentales que presume Trump — una medicina contra la malaria y un antibiótico — marquen una diferencia. Es una combinación que ya se está utilizando en miles de pacientes, y Fauci señaló que quisiera poner a una exhaustiva prueba su eficacia.
Los comentarios surgieron un día después del anuncio de Trump de extender hasta el 30 de abril las directrices de distanciamiento social que instan a la ciudadanía a suspender las reuniones sociales, a trabajar desde casa, cerrar las escuelas, y otras medidas para frenar la propagación del virus.
El gobierno de Donald Trump anunció el martes que está dispuesto a levantar las sanciones contra Venezuela en apoyo a una nueva propuesta de formar un gobierno de transición que represente a aliados tanto del presidente Nicolás Maduro como del dirigente opositor Juan Guaidó.
El secretario de Estado, Mike Pompeo, presentó el martes el plan de una página _denominado “Marco de transición democrática para Venezuela”_, reflejando una propuesta formulada por Guaidó durante el fin de semana. El plan revela cómo _ante el temor creciente por el coronavirus, que amenaza con abrumar el sistema de salud ya colapsado del país sudamericano y su economía paralizada_ Estados Unidos revive sus intentos de apartar a las fuerzas armadas de Maduro.
“Este marco puede proporcionar un camino que ponga fin al sufrimiento y abra el camino a un futuro más brillante para Venezuela”, dijo Pompeo en Washington.
Bajo el proyecto, tanto Maduro como Guaidó darían un paso al costado y entregarían el poder a un consejo de Estado de cinco miembros, el cual gobernaría hasta la realización de elecciones presidenciales y parlamentarias que pueden celebrarse en un plazo de seis a 12 meses. Unos 60 países, entre ellos Estados Unidos, reconocen a Guaidó como el líder legítimo de Venezuela.
El alto mando militar _el árbitro tradicional de las disputas políticas en Venezuela y apoyo clave para Maduro_ permanecería en su lugar durante el gobierno de transición.
Cuatro de los miembros serían elegidos _por mayoría de dos tercios_ por la Asamblea Nacional, controlada por la oposición y que preside Guaidó. El quinto miembro, que sería presidente en funciones hasta la realización de las elecciones, sería designado por los otros cuatro miembros del consejo. Ni Maduro ni Guaidó serían miembros del consejo, pero Pompeo dijo que Guaidó sería libre para postularse a la presidencia cuando se celebren elecciones.
“La esperanza es que este esquema promueva la selección de personas que gozan de amplio respeto y conocidas por su capacidad de colaborar con la otra parte”, dijo a la AP el representante especial de Estados Unidos para Venezuela, Elliott Abrams, en una explicación preliminar del plan. “La gente del mismo régimen ven esto y comprenden que Maduro debe partir, pero a los demás nos tratan bien y con imparcialidad”.
El plan también esboza los requisitos de Estados Unidos para levantar las sanciones que pesan sobre los funcionarios de Maduro y la industria petrolera, la fuente de casi todos los ingresos externos de Venezuela.
Si bien los acusados de abusos graves de los derechos humanos y el tráfico de drogas no se beneficiarán con el alivio de sanciones, los individuos que están en la lista negra debido a sus posiciones en el gobierno _miembros de la Corte Suprema, el consejo electoral y la asamblea constitucional_ sí lo serán.
Sin embargo, las sanciones solo desaparecerán cuando el consejo esté funcionando y las fuerzas extranjeras _cubanas o rusas_ se vayan del país.
“Nuestra esperanza es que con esto se intensifique la discusión en el seno del ejército, el chavismo, el gobernante partido socialista y el régimen sobre cómo salir de la crisis terrible en la que están sumidos”, dijo Abrams.El ministro de Relaciones Exteriores de Maduro, Jorge Arreaza, rechazó el llamado al diálogo y dijo que Maduro “jamás traicionaría la confianza que le dio el pueblo”.
En un comunicado, el gobierno venezolano rechazó la propuesta de Washington para un gobierno de transición, diciendo que es un “adefesio de acuerdo” que desconoce la voluntad expresada por el pueblo en las urnas.
Durante meses, Estados Unidos ha utilizado las presiones económicas y diplomáticas para tratar de quebrar el apoyo de las fuerzas armadas a Maduro, y la semana pasada fiscales estadounidenses acusaron al presidente, el ministro de Defensa y el titular de la Corte Suprema, entre otros, de narcotráfico y lavado de dinero.
Con todo, un plan, cualquiera que sea, difícilmente tendrá el apoyo de Maduro a menos que lo proteja de la justicia estadounidense, dijo David Smilde, investigador sénior de la organización Washington Office on Latin America (Oficina sobre América Latina en Washington). La constitución chavista de 1999 protege a los venezolanos de la extradición, pero un régimen de transición podría modificarla.
“Es difícil ver cómo esto convencerá a los actores principales en el gobierno”, dijo Smilde. “Aparentemente creen que los militares van a intervenir, pero eso parece sumamente improbable”.
También requeriría el apoyo de Cuba, China o Rusia, todos los cuales son patrocinadores clave de Maduro.
El enfrentamiento entre Maduro y Guaidó sólo se ha vuelto más tenso en los últimos días. El fiscal jefe de Maduro convocó el martes a Guaidó para testificar después de que una de las personas acusadas por cargos de drogas dijo que firmó un contrato con el líder de la oposición y sus “asesores” estadounidenses para comprar rifles de asalto estadounidenses para un golpe planificado.
El equipo de Guaidó dijo que nunca se reunió con el general retirado, quien posteriormente se entregó a las autoridades y fue llevado a Estados Unidos desde su hogar en Colombia, donde había vivido desde 2018 a pesar de que Estados Unidos lo sancionó previamente por contrabando de drogas.
Dos muertos y 52 personas infectadas con el virus del COVID-19 han sido reportadas en London-Middlesex. Mientras en la ciudad de St. Thomas se reportó el primer muerto.
La Unidad de Salud Middlesex-London (MLHU) informó que ya se han registrado la muerte de tres personas en la región a causa del COVID-19.
«Estamos viendo que en London la propagación del virus se ha registrado en personas que no tiene historial de viajes ni contacto cercano con COVID-19», dijo el Oficial Médico de Salud y CEO de MLHU, Dr. Chris Mackie, en un comunicado. «No puedo aclarar esto, lo que hagamos ahora determinará cómo se desarrolla la situación en London y el condado de Middlesex. Es hora de quedarse en casa y solo salir para cosas esenciales” concluyo el galeno.
Perfil de los fallecidos
Según la Unidad de Salud Middlesex-London, las tres muertes registradas en el área, son de tres mujeres de la tercera edad con edades que oscilaban entre 80 y 90 años.
En el hospital General St. Thomas Elgin (STEGH) se registró la tercera muerte de la región, según el informe, la mujer no tenía antecedentes de viaje.
Sarnia registra 39 casos y cuatro muertes
Sarnia-Lambton confirmo 39 casos y cuatro muertes relacionadas con el COVID-19.
Existe preocupación en la región ya que uno de los brotes se ha registrado en una casa de retiro ubicada en Landmark Village.
Mientras tanto, Huron-Perth informó su primera muerte el lunes, con un total de nueve casos en la región; incluido un residente de Hillside Manor Long Term Care Home.
Las autoridades de salud de BC, confirmaron la muerte de cinco personas más a causa del COVID-19, marcando de esta manera, el día más mortal desde que el virus se registró por primera vez en la provincia.
La oficial de salud provincial, Dr. Bonnie Henry, y el ministro de Salud, Adrian Dix, anunciaron las últimas muertes y 43 nuevos infectados con el virus en la provincia. El número de muertos en B.C. ahora se llega a 24, y 1,013 casos registrados.
«Queremos extender nuestras condolencias a las familias de las cinco personas que fallecieron en el último día, de las 24 personas que fallecieron de COVID-19 desde el comienzo de esta epidemia en Columbia Británica», dijo Dix.
La doctora Henry, reveló que se han reportado infecciones por coronavirus en 19 hogares de cuidado a largo plazo e instalaciones de vivienda asistida a lo largo de Columbia Británica. Cada uno está siendo tratado.
La funcionaria de salud provincial también señaló, que si bien el recuento de casos de B.C. ahora ha superado los 1,000, unas 507 personas también se han recuperado completamente del virus. Nuevamente enfatizó que Columbia Británica se encuentra en una «coyuntura crítica» en su lucha contra COVID-19, y rogó al público que permanezca vigilante y siga las precauciones necesarias.
«Este es nuestro momento crítico aquí en Columbia Británica, las próximas dos semanas. Debemos ser fieles a quienes somos en Columbia Británica», dijo Henry. «Nadie es inmune a este virus, pero todos pueden marcar la diferencia».
De los actuales casos activos de COVID-19, 128 personas están hospitalizadas, incluidas 61 que están en cuidados intensivos.
Estadisticas del COVID-19 en BC
Los funcionarios pidieron a las personas mayores que tienen mayor riesgo de enfermedad grave que se queden en sus casas, minimicen su riesgo y confíen en la comunidad para sus necesidades básicas. Se ha instado a las personas más jóvenes a que dejen de ver a sus amigos cara a cara, incluso mientras tratan de mantener una distancia de dos metros entre sí, y a mantener toda la interacción social en línea.
La doctora, Henry también pidió a las personas que eviten viajar innecesariamente, en particular de las ciudades a «comunidades más pequeñas en las que es posible que no puedan apoyarlo si se enferma y donde no tenemos tantos recursos».
Los hogares de cuidado que han visto casos de COVID-19 hasta ahora son: