Sus habitantes se encuentran preocupados por ser el “punto caliente por COVID-19” en Ontario, al presentar nuevos casos entre los trabajadores agrícolas. A esto se le suman problemas económicos y fallas en medidas óptimas de protección; a lo que el Premier respondió con nuevos fondos de financiación.
En su visita al territorio, deteniéndose para el corte de cabello prometido si toda la provincia entraba a ‘Etapa 2’, habló sobre los beneficios económicos hacia este sector que se ha visto duramente afectados.
En los casos de Kingsville y Leamington, fueron los últimos en hacer la transición el 7 de julio, debido a las altas tasas de COVID-19 en el área, principalmente entre los trabajadores agrícolas, muchos de ellos en Canadá bajo el programa de Trabajadores Extranjeros Temporales.
Pero la visita del Premier se produce cuando la Unidad de Salud local informó de 11 nuevos casos de COVID-19. Desde el inicio, más de 830 trabajadores agrícolas han dado positivos y dos hombres mexicanos han muerto después de contraer el virus. Actualmente, más de 150 casos permanecen activos, mientras el equipo de gestión de emergencias ya se encuentra desplegando un plan para mitigar la propagación.
El Programa de Gestión de Riesgos de la provincia será el encargado de proteger a los agricultores contra situaciones «fuera de su control» como inundaciones, sequías o enfermedades. El gobierno de Ontario ha destinado anualmente $150 millones que cubre al rededor del 80% de los operadores comerciales en las industrias ganaderas y de producción.
Para la temporada de crecimiento 2020, el gobierno ha agregado mano de obra como un riesgo asegurable bajo el programa debido a COVID-19, y los agricultores tienen hasta el 30 de julio de 2020 para solicitarlo.
Fondos para estragos del COVID-19
Este anuncio se produce inmediatamente después de un aumento de fondos federales de $19 mil millones para las provincias y territorios, incluidos $ 7mil millones para Ontario.
«Este financiamiento nos apoyará a medida que la economía avance en los próximos seis u ocho meses», dijo Ford. «Este es un gran negocio para Canadá y es un gran negocio para Ontario».
Pero la financiación no fue lo que los funcionarios esperaban escuchar del premier, ya que han estado presionando al gobierno de Ontario para que designe un coordinador para supervisar las diferentes agencias involucradas en responder a los brotes de COVID-19 en granjas en Leamington y Kingsville.
La oportunidad de tener esa conversación no llegó
«No tuvimos la oportunidad de plantear ninguno de los problemas que nos hubiera gustado», dijo la alcaldesa de Leamington, Hilda MacDonald. También señala que la provincia necesita tener una supervisión completa de los brotes entre los trabajadores agrícolas a nivel local.
En el caso de Kingsville, el alcalde Nelson Santos, dijo que Ford se reunió con propietarios de pequeñas empresas en su ciudad.
La alta tasa de la enfermedad a nivel local ha impedido que Windsor-Essex avance con la Etapa 3 de reapertura junto con el resto de la provincia el viernes. La mayoría de Windsor-Essex entró en la Etapa 2 el 25 de junio.
Coordinación de emergencia solicitada ‘sin respuesta’ de Ontario
El alcalde Drew Dilkens y otros líderes políticos en el área, pidieron al Emergency Management Ontario la semana pasada, un coordinador para supervisar las pruebas y otros esfuerzos en las áreas de Leamington y Kingsville.
