Kim y Michelle Krezonoski comenzaron sus carreras como corredores en los caminos de tierra del campamento de Shuniah Township, cerca de Thunder Bay, Ontario.
Esta semana, las gemelas de 30 años cruzaron la línea de meta para convertirse en las dos mejores finalistas del maratón de Boston de Canadá.
En su primera prueba en Boston, Michelle completó la carrera de 42,2 kilómetros en 2 horas, 38 minutos y 23 segundos (2:38:23). Kim estaba solo un par de minutos detrás de ella con un tiempo de 2:40:50. Hellen de Kenia defendió con éxito su título, convirtiéndose en la primera mujer en ganar consecutivamente desde 2005.
Michelle y Kim son del noroeste de Ontario pero ahora viven en Toronto.
«Es una oportunidad única tener a tu hermana gemela contigo en un torneo importante mundial en el campo profesional», dijo Michelle.
Hubo alrededor de 30.000 participantes, entre ellos más de 1.500 canadienses, de más de 100 países en el 128º Maratón de Boston, el más antiguo del mundo y uno de los seis grandes maratones mundiales.
La carrera, celebrada el 15 de abril, fue la segunda maratón de Michelle y la tercera de Kim.
Mientras la policía los escoltaba desde su alojamiento hasta un autobús, el personal del hotel se alineó en el pasillo para animarlos antes de llevarlos a la línea de salida.
«Tenía lágrimas en los ojos porque me di cuenta de lo mucho que significa esta carrera para la ciudad, de lo mucho que hemos trabajado para entrar en ese campo y luego abordar un autobús con algunos de los mejores atletas del mundo», dijo Kim.
«Pensar que venimos de algún lugar sin alumbrado público en el medio del norte de Ontario es realmente genial», añadió Michelle.
«Este es uno de esos momentos que siempre recordarás por el resto de tu vida».
Atravesando la distancia
Las hermanas tienen primeros recuerdos de competencias de atletismo y carreras divertidas en Thunder Bay. Su primera gran carrera en ruta fue la carrera anual Ten Mile Road Race de la ciudad en 2018.
«Fue un recuerdo muy especial porque crecimos viendo esa carrera, y luego tener a nuestros padres viéndola, a nuestra familia viéndola y a nuestros amigos en la comunidad de Thunder Bay hizo que fuera un momento realmente orgulloso», dijo Kim.
Después de eso, avanzaron hasta medias maratones en la escuela de posgrado y luego comenzaron a hacer maratones completos. Los Krezonoski dicen que sus padres siempre los han apoyado y que su padre es una figura clave en la comunidad de corredores de Thunder Bay.
«Volaron desde Thunder Bay [a Boston] y caminaron más de 12 millas hasta [unos 19 km] llegar a la cima de Heartbreak Hill, animarnos durante cinco segundos y luego caminar todo el camino de regreso», dijo Michelle.
