La economía canadiense corrió hacia la línea de meta del 2020 con un crecimiento de casi dos dígitos en el cuarto trimestre, terminando su peor año registrado con una nota sólida que ha continuado hasta principios de 2021.
La economía creció a una tasa anualizada del 9,6% durante los últimos tres meses de 2020, informó el martes Statistics Canada, por debajo de una tasa de crecimiento anualizada del 40,6% en el tercer trimestre, cuando el país emergió por completo del casi cierre de la primavera pasada.
A pesar del resultado mejor de lo esperado para el trimestre en su conjunto, el crecimiento se desaceleró en diciembre con un aumento del 0,1% en el mes, que siguió a un aumento del 0,8% en noviembre.
De cara a enero, Statistics Canada manifestó que su estimación inicial era de un crecimiento de la economía del 0,5%.
«Es posible que muchas pequeñas empresas, sus peluqueros locales, su restaurante o tiendas locales, hayan tenido que cerrar debido a las restricciones, pero muchas otras áreas lograron seguir avanzando», dijo el economista jefe de BMO Douglas Porter.
El economista jefe de CIBC, Avery Shenfeld, escribió en una nota que la cifra de principios de enero debería dejar de lado los temores de una recesión total en el primer trimestre de 2021.
Se esperaba que la pandemia de COVID-19 hiciera saltar la economía después de que la propagación del virus cerrara negocios y dejara a millones sin trabajo. La pregunta era qué tan malo sería.
La respuesta que proporcionó la agencia de estadísticas el martes fue que el producto interno bruto real se contrajo un 5,4%, la caída anual más pronunciada desde que se registraron por primera vez datos comparables en 1961.
La caída del año se debió al cierre de grandes franjas de la economía en marzo y abril.
La actividad económica creció lenta y constantemente entre mayo y noviembre, aunque los cierres cerrados renovados en algunas áreas y una temporada de venta minorista de vacaciones moderada en diciembre vieron el último mes del año contrarrestar esa tendencia.
El gasto federal también ha amortiguado el golpe. Statistics Canada informó el lunes que la ayuda del gobierno ha compensado con creces las pérdidas de sueldos y salarios, en particular para los hogares de bajos ingresos.
Los ahorros se dispararon: el economista principal de RBC, Nathan Janzen, expuso que los hogares acumularon $212 mil millones en ahorros el año pasado, alrededor de $184 mil millones por encima de las tendencias previas al shock, lo que podría dar una sacudida a la economía a medida que avanza el año.
Los diferentes impactos en los sectores y el cambio en las compras online, entre otros efectos, hacen que el PIB sea una medida imperfecta de lo que atravesó la economía.
El economista Armine Yalnizyan afirmó que una aceleración de las ventas digitales en la industria minorista podría alterar aún más el indicador económico clave si los cambios tecnológicos reducen los precios y los salarios y, en última instancia, afectan los ingresos fiscales.
Los liberales han hablado más sobre los niveles de empleo como una métrica clave de la recuperación. Es por eso que los expertos dicen que las cifras del PIB del martes probablemente no cambiarán los planes de gasto federal que los liberales deben delinear en las próximas semanas como parte de un presupuesto que el gobierno ha dicho que incluiría hasta $100 mil millones en medidas de estímulo durante un período de tres años.
«El gobierno no tiene ningún plan, pero hablan de reconstruir mejor», aseveró la líder conservadora Erin O’Toole. «Y eso realmente significa que van a dejar a algunas personas en algunos sectores que no les gustan fuera de la recuperación económica», añadió.
O’Toole no ofreció detalles propios, diciendo que los conservadores de la oposición tendrían un plan de recuperación detallado antes de las próximas elecciones federales.
Los liberales están revisando una larga lista de ideas presupuestarias para ayudar a manejar el resto de la pandemia y ayudar en la recuperación.
