Llevar niños a los bloqueos antigubernamentales, que han inmovilizado el centro de Ottawa y cerrado los cruces fronterizos, es una de las actividades que podrían generarles a los manifestantes una multa de $5.000 o cinco años de prisión mientras Canadá está bajo la Ley de Emergencias Nacionales.
El mismo castigo se aplicaría a cualquier persona que participe directamente en las protestas o que traiga ayuda, como alimentos o combustible, a los involucrados.
El fiscal general David Lametti indicó el martes que la decisión de utilizar la ley no se tomó a la ligera.
El ministro de Seguridad Pública, Marco Mendicino, sostuvo en una conferencia de prensa el martes en Ottawa que los bloqueos están “impulsados por una ideología para derrocar al gobierno” y que hay elementos dentro de ellos que representan una seria amenaza para la seguridad.
Señaló la incautación el lunes de múltiples armas y el arresto de 13 personas en el bloqueo cerca de la frontera en Coutts, Alta. Mendicino añadió que debería ser una llamada de atención para los canadienses sobre “qué es lo que estamos tratando precisamente aquí”.
Los detalles de las regulaciones contenidas en dos órdenes del gabinete aún no se hicieron públicos el martes por la noche, pero los funcionarios de los Departamentos de Justicia y Finanzas, así como de la RCMP, brindaron un informe técnico a los medios con la condición de no ser identificados.
La policía de Ottawa ha dicho en repetidas ocasiones que la presencia de niños dificulta que los agentes hagan cumplir la ley, por temor a que cualquier enfrentamiento con los manifestantes pueda ponerlos en peligro. La semana pasada, la policía manifestó que creía que unos 100 niños vivían en camiones y casas rodantes en los alrededores de Parliament Hill.
Las regulaciones también enumeran los lugares en los que no se permiten los bloqueos, incluido Parliament Hill y las calles a su alrededor conocidas como el recinto parlamentario donde se encuentran muchos edificios federales. Cientos de vehículos han bloqueado las carreteras allí durante más de dos semanas.
También se aplican a aeropuertos, puertos, cruces fronterizos, muelles, faros, canales, puentes interprovinciales e internacionales, hospitales, corredores comerciales e infraestructura necesaria para el suministro de servicios, incluidas la generación y transmisión de energía.
Una orden sobre medidas económicas de emergencia otorga poderes especiales a la policía, los bancos y las compañías de seguros para congelar cuentas y cancelar seguros de vehículos pertenecientes a personas que participen en lo que las órdenes consideran “reuniones ilegales”.
Las empresas de remolque están siendo designadas como esenciales y deben ayudar a la policía a retirar los vehículos de los bloqueos cuando se les solicite, o la policía podría confiscar sus grúas para retirar los vehículos ellos mismos. La policía de Ottawa y Windsor, Ontario, dice que los operadores de remolque rechazaron sus solicitudes por temor a las represalias de las empresas de camiones que proporcionan gran parte de su negocio.
