Los familiares del adolescente de Edmonton, que murió luego de ser apuñalado afuera de su escuela secundaria a principios de este mes, quieren que los siete menores acusados sean castigados como adultos.
Karanveer Sahota, de 16 años, estaba esperando el autobús afuera de la escuela secundaria McNally el 8 de abril cuando supuestamente siete adolescentes lo agredieron. La autopsia determinó que fue apuñalado en el pecho. Murió a causa de sus heridas en el hospital el 15 de abril.
Las siete personas acusadas de asesinato en segundo grado tienen entre 14 y 17 años.
Monica Binns y Shivleen Sidhu, dos primas de Sahota, buscan que los implicados sean acusados como adultos.
“El hecho de que tengan 16 años no justifica su comportamiento”, dijo Binns. “Eran adultos en ese momento… no lo golpearon con un libro escolar”.
Sidhu, quien es abogada asociada, sostiene que considerar a los siete acusados como niños sería una injusticia. También quiere que se revelen sus identidades y que no estén protegidas por la Ley de Justicia Juvenil.
Sidhu agregó que quiere que rindan cuentas, y si es necesario cambiar las leyes para que eso suceda, que así sea.
Binns dice que la familia Sahota no ha sido contactada por los padres de ninguno de los siete acusados, ni se les pidió disculpas.
“En cambio, estos padres han pasado su tiempo inventando excusas para sus hijos y tratando de protegerlos de la ley. Eso está muy mal”, indicó.
