OTTAWA – El primer ministro Justin Trudeau pudo salir de su hotel de cuarentena aproximadamente 12 horas después de registrarse, luego de dar negativo a la prueba COVID-19 que se le realizó al ingresar al país.
A los que estaban en el hotel se les pidió que permanecieran en sus habitaciones y se les entregaron loncheras a la llegada y un desayuno para llevar en la puerta.
Trudeau estuvo en el extranjero desde el jueves pasado hasta el martes para las cumbres con otros líderes del G7, la OTAN y europeos.
Su oficina asegura que Trudeau seguirá las reglas y consejos de salud pública para los canadienses que regresen del extranjero durante la pandemia, al igual que los funcionarios y periodistas que también viajaron al extranjero.
Las reglas incluyen ponerse en cuarentena durante 14 días y realizar otra prueba de COVID-19 aproximadamente siete días después de la llegada.
La estadía de Trudeau en un hotel se produjo después de que su gobierno liberal hubiera pasado meses defendiendo la política de obligar a la mayoría de los canadienses que regresaban de un viaje internacional a la cuarentena en una habitación de hotel por hasta tres días a su cargo.
Ottawa ha dicho que la política, junto con su lista de otras medidas fronterizas, ha sido efectiva para limitar la entrada de COVID-19 al país, a pesar de que las provincias han pasado la mayor parte de la primavera luchando contra una tercera ola mortal de la pandemia impulsada por una variante.
Un panel de revisión de expertos indicó recientemente que la política de cuarentena hotelera no tenía base científica y recomendó al gobierno que la elimine. El panel señaló que los viajeros que vuelan a Estados Unidos y regresan a través de una frontera terrestre no enfrentan tal regla.
Los conservadores de la oposición han criticado el hecho de que el hotel de Ottawa en el que se alojó Trudeau no es uno de los alojamientos aprobados por el gobierno.
