PESHAWAR, Pakistán, 16 agosto – Más de 300 personas murieron en el noroeste de Pakistán después de dos días de intensas lluvias e inundaciones, dijeron el sábado funcionarios locales.
Las labores de rescate y limpieza de carreteras bloqueadas continúan con la liberación de fondos de emergencia, dijeron, y agregaron que las fuertes lluvias continuarán hasta el 21 de agosto.Nubarrones, inundaciones repentinas, rayos, deslizamientos de tierra y derrumbes de edificios causaron la peor racha de monzones de este año. A primera hora del sábado, se habían confirmado 307 muertos y más desaparecidos en las colinas y montañas de la región de Khyber Pakhtunkhwa, según la Autoridad Provincial de Gestión de Desastres.
No sólo Pakistán sino también partes de los vecinos India y Nepal se han visto duramente afectados por fuertes lluvias, inundaciones y otros incidentes relacionados con la lluvia durante la última semana.
El distrito de Buner, a tres horas y media en coche al norte de Islamabad, la capital de Pakistán, en circunstancias normales, fue uno de los más afectados del país, con 184 muertos y daños generalizados en infraestructura, cultivos y huertos, según informaron las autoridades locales. Un chaparrón, árboles caídos e inundaciones repentinas arrasaron con personas y pertenencias.
En algunas zonas de Buner había personas atrapadas por las inundaciones, entre ellas mujeres y niños, y se recuperaron 93 cadáveres.
En otra zona, Shangla, el colapso del techo de un edificio debido al aguacero causó muchas de las 34 muertes, dijo el secretario jefe provincial, Shahab Ali Shah.
Dijo que se habían enviado funcionarios locales a las zonas inundadas para supervisar las operaciones de socorro y evaluar los daños.
Dijo que se estaban estableciendo campamentos médicos para las víctimas de las inundaciones, además de proporcionar comidas preparadas a las familias que perdieron sus hogares. Shah indicó que se desplegaría maquinaria pesada para limpiar y restaurar las carreteras.
Ishaq Dar, viceprimer ministro y ministro de Asuntos Exteriores, dijo que equipos civiles y militares estaban realizando operaciones de rescate y socorro, mientras que el primer ministro había presidido una reunión de emergencia.
“Nuestros corazones están con las familias que han perdido a sus seres queridos, con aquellos que están heridos y con muchos cuyos hogares y medios de vida han sido arrasados”, dijo Dar en un comunicado en las redes sociales.
El viernes, un helicóptero de rescate se estrelló, debido al mal tiempo, muriendo los cinco miembros de la tripulación.
