Una pizza flambeada y la decoración del local, lleno de plantas artificiales, fueron los detonantes del incendio mortal en un restaurante italiano de Madrid, “una ratonera” que ardió “en diez segundos” y dejó dos fallecidos y doce heridos, mientras la Policía dirige las primeras investigaciones.
La noche del viernes se convirtió en una tragedia para los comensales del restaurante italiano Burro Canaglia Bar & Resto cuando antes de la medianoche ardió el local, de pequeñas dimensiones y con cerca de 30 personas en su interior, por una llama que llegó al techo del establecimiento y se propagó “en cuestión de diez segundos” por la decoración del local con plantas de plástico.
El fuego dejó dos fallecidos, una clienta y un trabajador, y doce heridos, ocho de los cuales continúan hospitalizados, varios de ellos en la UCI y otros en las Unidades de Grandes Quemados, con quemaduras de entre el 8 y 25 % de su cuerpo.
Los efectivos de la Policía Científica se personaron hoy en el lugar de los hechos para realizar las comprobaciones oportunas de cara a una primera valoración de lo ocurrido, realizando fotografías en el interior y el exterior.
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida, señaló que fue una pizza flambeada lo que pudo prender la decoración del restaurante que, según explicó el regidor, no tenía salida de emergencia porque dadas “las dimensiones del local y el número de comensales que tiene autorizado, no era necesario”.
“Solo había una salida del local”, afirmó en su declaración Martínez Almeida.
El fuego se localizó en la entrada del restaurante, lo que impidió a las personas que estaban dentro poder salir. Algunas de ellas, se fueron hacia el interior y otras se quedaron atrapadas justo en la puerta del local, explicó Carlos Marín, jefe de guardia de Bomberos de Madrid.