
El primer ministro electo de Canadá, Justin Trudeau, asistió hoy al funeral del diplomático canadiense Ken Taylor, quien acogió de forma secreta en la embajada de ese país en Irán a seis estadounidenses durante la crisis de los rehenes en 1979.
Taylor, que era el embajador de Canadá en Irán en 1979, murió el pasado 15 de noviembre en un hospital de Nueva York a los 81 años de edad.
Al funeral, celebrado en Toronto, también asistió el exprimer ministro canadiense Joe Clark, pero no el primer ministro en funciones, Stephen Harper.
El conservador Harper perdió las elecciones generales el pasado 19 de octubre y permanece al frente del Gobierno canadiense hasta que Trudeau asuma el cargo a principios de noviembre.
Taylor se convirtió en un héroe en Canadá y Estados Unidos cuando en noviembre de 1979 ocultó en su residencia de Teherán a seis diplomáticos que habían escapado al ataque de estudiantes revolucionarios iraníes que asaltaron la embajada estadounidense en Irán.
Los estudiantes revolucionarios capturaron 52 estadounidenses y los mantuvieron como rehenes durante 444 días.
Pero los seis diplomáticos estadounidenses que escaparon permanecieron ocultos durante tres meses en la residencia de Taylor y en la del «número dos» de la embajada canadiense, John Sheardown.
Los estadounidenses pudieron finalmente escapar de Teherán gracias a una compleja operación de los servicios secretos de EE.UU. y la decisión del entonces primer ministro de Canadá, Joe Clark, de emitir pasaportes canadienses a los seis diplomáticos.
Por sus acciones durante la crisis de los rehenes, Taylor recibió la Medalla de Oro del Congreso estadounidense «por su valentía e ingenio al proteger a seis ciudadanos estadounidenses y finalmente conseguir su regreso sanos y salvos».
En 1980, Taylor fue nombrado cónsul general de Canadá en Nueva York.
Toronto (Canadá), 27 oct (EFE).-