NUEVA YORK – Sean «Diddy» Combs fue absuelto el miércoles de cargos de tráfico sexual y crimen organizado que podrían haberlo puesto tras las rejas de por vida, pero fue declarado culpable de delitos menores relacionados con la prostitución, en un revés para los fiscales que dijeron que el magnate de la música usó «violencia y miedo» para abusar de las mujeres.

El veredicto es en general una victoria para Combs, un ex multimillonario conocido por elevar el hip-hop en la cultura estadounidense.

El jurado de 12 miembros lo condenó por unanimidad por dos cargos de transporte para ejercer la prostitución, pero absolvió a Combs de conspiración con fines de extorsión y dos cargos de tráfico sexual de dos de sus ex parejas románticas: la cantante de rhythm and blues Casandra «Cassie» Ventura y una mujer conocida en el tribunal por el seudónimo de Jane.

Después de que el juez despidiera al jurado y a los abogados de ambas partes, Combs se arrodilló ante su silla y pareció rezar. Luego, Combs se levantó y se dirigió a la galería de la sala.

«Llegaré pronto a casa», dijo sonriendo y juntó las manos. «Te quiero. Gracias, te quiero».

La familia de Combs y sus seguidores estallaron en aplausos y vítores.

Combs, de 55 años, que se declaró inocente de los cinco cargos , enfrenta una sentencia máxima de 10 años de prisión por cada uno de los dos cargos de prostitución.

Los fiscales reconocieron en un expediente judicial que las directrices federales de sentencia parecían recomendar una pena máxima de cinco años y cuarto. Los abogados de Combs argumentaron que dos años sería el límite máximo.Se espera que el juez de distrito estadounidense Arun Subramanian celebre una audiencia a las 5 p.m. EDT (2100 GMT) sobre la solicitud de Combs de ser liberado bajo fianza en espera de la sentencia.

El juicio se centró en las acusaciones de los fiscales de que Combs utilizó durante dos décadas su imperio comercial para obligar a Ventura y Jane a participar en espectáculos sexuales de varios días de duración alimentados con drogas, a veces conocidos como » Freak Offs «, con trabajadores sexuales masculinos en habitaciones de hotel mientras Combs miraba, se masturbaba y ocasionalmente filmaba.

Durante el juicio que duró siete semanas en el tribunal federal de Manhattan, los jurados vieron algunas de las 1.000 botellas de aceite para bebés y lubricante que las autoridades encontraron durante los registros de sus casas y que, según los fiscales, utilizaba en sus actuaciones.

Los fiscales argumentaron sin éxito que la conducta de Combs hacia ambas mujeres equivalía a tráfico sexual porque obligó a Ventura y Jane a participar en las actuaciones utilizando violencia física y amenazas de retener el apoyo financiero o filtrar imágenes sexualmente explícitas de ellas.

«El acusado usó el poder, la violencia y el miedo para conseguir lo que quería», declaró la fiscal Christy Slavik en sus alegatos finales el 26 de junio. «No acepta un no por respuesta».

Absolución de tres cargos

La absolución del jurado de los cargos más graves indica que la fiscalía no logró trazar una línea directa entre el abuso de Ventura y Jane por parte de Combs y su participación en los actos sexuales.

La defensa reconoció que Sean ‘Diddy’ Combs incurrió en violencia doméstica, pero argumentó que Ventura y Jane eran mujeres fuertes e independientes que participaron consensualmente en las actuaciones sexuales porque querían complacer a Combs.

Los abogados defensores acusaron a los fiscales de intentar criminalizar la vida sexual privada de Combs.

Sarah Krissoff, ex fiscal federal en Manhattan, dijo que el jurado puede haber visto la conducta de Combs como evidencia de relaciones románticas tóxicas, pero no de tráfico sexual.

«No se ajusta a lo que ellos esperarían que sea tráfico sexual», dijo Krissoff, ahora socio del bufete de abogados Cozen O’Connor.

El fundador de Bad Boy Records podría haber enfrentado cadena perpetua si hubiera sido declarado culpable de tráfico sexual o conspiración con fines de extorsión.

Sean ‘Diddy’ Combs, otrora famoso por organizar lujosas fiestas para la élite cultural en lugares lujosos como los Hamptons y Saint-Tropez, ha estado detenido en una cárcel federal en Brooklyn desde su arresto en septiembre de 2024.

La familia de Combs salió del juzgado entre cánticos de «amor, amor, amor» de sus seguidores. Durante su carrera, Combs interpretó apodos como «Love», «Puff Daddy» y «P. Diddy».

En una declaración posterior al veredicto, la fiscalía de Estados Unidos de Manhattan, que presentó el caso, dijo que los delitos sexuales estaban «demasiado presentes» en toda la sociedad.

«Los estadounidenses quieren que se ponga fin a este flagelo y que los responsables sean llevados ante la justicia», se lee en la declaración del fiscal federal de Manhattan, Jay Clayton, y del agente especial a cargo de Investigaciones de Seguridad Nacional, Ricky Patel.

Tras el juicio penal, Combs aún enfrenta decenas de demandas civiles por abuso. Ventura lo demandó en noviembre de 2023 por tráfico sexual, y al día siguiente llegaron a un acuerdo por 20 millones de dólares. Combs, quien en su día fue aclamado por convertir a artistas como Notorious BIG y Usher en estrellas, ha negado cualquier irregularidad.

Después del veredicto, el abogado de Ventura, Douglas Wigdor, dijo en un comunicado que había «allanado el camino» para la condena de Combs.