VANCOUVER – Los detalles de los nuevos planes de BC para restringir los viajes dentro de la provincia no se anunciarán el viernes, pero los abogados ya predicen que traerá problemas.
La nueva orden le dará a la policía el poder de realizar bloqueos de carreteras COVID-19 con el objetivo de frenar los viajes entre regiones sanitarias, y los abogados de derechos civiles y penales aseguran que es probable que algunos aspectos de la misma sean cuestionados en los tribunales.
“Actualmente, la policía no tiene la autoridad legal para hacer preguntas como ‘¿A dónde vas, de dónde vienes, con qué propósito?’”, afirmó la abogada Hasha Walia, directora ejecutiva de la Asociación de Libertades Civiles de BC.
El nuevo plan para los puntos de control de viajes es «significativamente diferente» a las campañas contra el consumo de alcohol y la conducción con las que los políticos lo han comparado, dijo Walia.
“Va a ser interesante ver cómo el gobierno obligará a la gente a responder preguntas en una barricada”, agregó.
“No veo esto como muy efectivo en absoluto, porque estamos trabajando en el sistema de honor. Entonces (si) alguien dice ‘Viajo por trabajo’, ¿tiene que demostrarlo con documentación adicional?”, preguntó.
Lee espera escuchar a los habitantes de BC a quienes se les imponen multas por cruzar los límites de las regiones sanitarias.
La provincia insiste en que no se dirige a personas de color o personas que viajan diariamente al trabajo, sino que busca castigar a las personas que viajan a través de las regiones sanitarias para recreación, y ha sugerido que se pueden establecer bloqueos de carreteras en la autopista 1 que sale de Metro Vancouver y en las terminales de BC Ferries.
