La RCMP de Nueva Escocia está reduciendo sus esfuerzos de búsqueda de dos niños pequeños que han estado desaparecidos de su hogar en el condado de Pictou durante más de seis días, diciendo que es poco probable que todavía estén vivos.
Más de 160 personas, ayudadas por helicópteros, drones y perros rastreadores, habían estado recorriendo una franja densamente arbolada de la provincia alrededor de Lansdowne Station, una aldea rural al suroeste de New Glasgow, desde que Lily Sullivan, de seis años, y Jack Sullivan, de cuatro años, fueron reportados como desaparecidos el viernes pasado por la mañana.
La policía de Nueva Escocia, dijo inicialmente que creía que la pareja de niños se había alejado mientras su padrastro y su madre dormían, pero la unidad de delitos mayores de la Policía Montada también está investigando la posibilidad de un acto criminal, pero se negaron a decir si sospechan de un crimen.
El sargento Curtis MacKinnon, comandante de distrito de la Real Policía Montada de Canadá (RCMP) del condado de Pictou, reconoció que las posibilidades de supervivencia de la pareja son escasas después de tanto tiempo, pero afirmó que la policía aún tenía esperanzas de encontrar a los niños. Añadió que los agentes volverían a inspeccionar las zonas previamente registradas.
«No vamos a hacer las maletas ni a darnos por vencidos», dijo a los periodistas, reunidos en un puesto de mando fuera del hogar de los niños.
Ha sido un esfuerzo de todos, utilizando todos los recursos y herramientas disponibles. Estamos pasando de una búsqueda a gran escala a búsquedas en áreas más pequeñas y específicas de Nueva Escocia. Volveremos sobre nuestros pasos para asegurarnos de que se hayan encontrado todas las pistas.
No se ha reportado ningún avistamiento de los niños, dijo. Es posible que se solicite la presencia de perros rastreadores de cadáveres, añadió. Decenas de voluntarios serán retirados de la búsqueda hoy, añadió.
El sargento Robert McCamon declaró que la unidad de delitos graves de la Real Policía Montada de Canadá (RCMP) ha estado involucrada en el caso desde el sábado, pero que no especularía sobre lo que pudo haberles sucedido a los niños. Añadió que, dadas las condiciones en el exterior y el tiempo que llevan desaparecidos, la investigación debe reorientarse.
«La probabilidad de que estén vivos en este momento es muy baja», dijo.
El padrastro, Daniel Martell, dijo a los medios que la policía lo entrevistó durante cuatro horas en el destacamento de la RCMP del condado de Pictou en la ciudad de Stellarton el martes por la noche, luego de un quinto día de buscar a los hermanos en el bosque cerca de su casa.
Lily y Jack fueron reportados como desaparecidos alrededor de las 10 a. m. del viernes. Su madre, Malehya Brooks-Murray, y Martell dijeron que se despertaron en una casa silenciosa y supusieron que los niños salieron por la puerta corrediza trasera a jugar y se alejaron. No se les ha visto desde entonces.
“Mi historia ha sido coherente. Cuando dices la verdad, siempre es coherente”, dijo el Sr. Martell.
Dijo que la policía le pidió que les explicara paso a paso lo sucedido el 2 de mayo, día en que se reportó la desaparición de los niños, y los días anteriores. Le pidieron que dibujara mapas y señalara los posibles lugares donde se encontraban los niños, añadió.
Ninguno de los dos niños había asistido a la escuela esa semana desde el martes, según declaró el Sr. Martell a los medios. Dijo que se quedaron en casa el jueves y el viernes (el miércoles no hubo clases) porque Lily tenía tos.
La Sra. Brooks-Murray ha estado viviendo con su madre en un pueblo cercano desde que los niños desaparecieron, y el señor Martell dijo que él y su esposa sólo han tenido contacto esporádico desde entonces.
En declaraciones a los medios el miércoles por la mañana, la madre de la Sra. Brooks-Murray, Cyndy Murray, declaró: «No estamos hablando de nada ahora mismo. La policía nos lo dijo».
El señor Martell dijo que todavía mantiene la esperanza de que los niños sean encontrados sanos y salvos.
El lunes, dijo a los medios que los equipos de búsqueda y rescate habían estado haciendo lo que podían, pero que no se había encontrado evidencia de los niños.
Ya solicité que se desplegaran agentes en la frontera de Nuevo Brunswick y la frontera con la Isla del Príncipe Eduardo, y en todos los aeropuertos. ¿Lo están haciendo? Dijeron: «Esa no es la preocupación ahora mismo», dijo el Sr. Martell.
