Este martes, el experto en infecciones emergentes de la Universidad de Oxford, Peter Horby, y el profesor de medicina y epidemiología, Martin Landray, indicaron los parámetros del ensayo para el nuevo tratamiento que aceleraría la mejora de los infectados por el virus.
El estudio, según explicaron, se pondrá a prueba en pacientes no hospitalizados. De esta manera, se confirmará la eficacia y seguridad del nuevo tratamiento antiviral tecovirimat, creado inicialmente para la viruela.
Si bien las vacunas utilizadas para tratar la viruela podrían reducir el riesgo de contagio del virus, actualmente no existen tratamientos que aceleren la recuperación en personas afectadas.
¿Qué haría el nuevo Tecovirimat?
El tratamiento evita que el virus abandone las células infectadas, frenando su propagación dentro del cuerpo. Este tratamiento se emplea para la recuperación de pacientes con complicaciones severas por la enfermedad que han sido hospitalizados, pero hasta la fecha no hay pruebas que confirmen si el medicamento puede ayudar a cualquier infectado a recuperarse de la enfermedad.
“La viruela del mono es una infección angustiosa que ocasiona síntomas bastante severos. Un 10 por ciento de los pacientes termina hospitalizado con complicaciones”, señaló Peter Horby, también director del nuevo Instituto de Ciencias de la Pandemia y líder del ensayo.
En este ensayo se esperan reclutar 500 voluntarios, con el fin de comprobar si el fármaco es seguro, efectivo y cumple con el objetivo de reducir los síntomas y complicaciones de los infectados.
Por lo tanto, los expertos evaluarán durante la prueba el ritmo con el que sanan las lesiones de la piel y cuánto tiempo tardan en dar negativo para el virus.
