Lara Trump tomó las riendas de la dirección del Comité Nacional Republicano para recuperar el control de la dañada imagen de Donald Trump.
“Mi objetivo número uno es asegurarme de que Donald Trump sea el presidente número 47”, dijo Lara Trump, copresidenta del Comité Nacional Republicano..
Es un paso más para solidificar el control de Trump sobre el Partido Republicano. La nuera del expresidente no ha perdido tiempo en cambiar el nombre del comité, típicamente serio, a la imagen de Trump, adoptando su propia versión de su política pugilista y su descarado estilo de gestión de maneras que afirman su influencia sobre el establishment republicano.
El Comité despidió a docenas de empleados de larga antiguedad y buscó alianzas con negacionistas electorales, teóricos de la conspiración y defensores de la extrema derecha que el partido había mantenido anteriormente a distancia.
Lara Trump, casada con el tercer hijo de Trump, Eric, ha sido una abierta defensora del expresidente y no ha dudado en criticar a sus enemigos, prometiendo cuatro años de represalias políticas de “tierra arrasada” si gana las elecciones.
Ha liderado un fuerte aumento en la recaudación de fondos, una necesidad particularmente aguda para la candidatura electoral de Trump porque sus operaciones de recaudación de fondos políticos han gastado decenas de millones de dólares en honorarios legales para defenderlo en casos penales y civiles.
Los partidarios de Trump dicen que Lara Trump está dando nueva vida al partido y dicen que su carisma y su tenaz ética de trabajo la convierten en una opción ideal para servir como su defensora.
Pero su instalación ha generado preocupación entre algunos republicanos que dicen que el RNC está siendo dirigido de maneras que podrían perjudicar su mandato de ayudar a todos sus candidatos a lo largo de la boleta electoral. Al priorizar la campaña presidencial, dijeron, es posible que el RNC no pueda dedicar los recursos necesarios para ayudar a otros solicitantes de cargos.
“En cierto modo sugiere una expectativa de lealtad completa, descarada y, tal vez, ciega hacia el candidato”, dijo Marc Racicot, ex presidente del Comité Nacional Republicano que fue gobernador de Montana durante ocho años.
Al reconocer que se enfrenta a una gran curva de aprendizaje, Lara Trump dijo que tiene experiencia para tener éxito, ya que trabajó en las dos campañas presidenciales anteriores de Trump.
“Sería difícil encontrar a alguien que haya tenido tanta experiencia política como yo en cualquier campaña en este momento, y poder decir eso es algo único”, dijo.
También es consciente de que, como Trump, constituye un blanco político particularmente tentador.
“Ciertamente”, dijo, “estoy en la mira de muchas personas en este puesto”.
