El estallido de disparos el jueves por la tarde sorprendió a los suburbios de Collierville, los compradores y empleados corrieron a refugiarse en los pasillos de las tiendas y los congeladores antes de que el atacante se quitara la vida en medio de una respuesta policial masiva, indicaron.
Las autoridades aumentaron su conteo inicial del número de víctimas de 2 a 15, incluida Olivia King, que fue asesinada en el lugar, y otras que lucharon por sus vidas durante la noche en los hospitales del área.
Lane aseveró que los investigadores reunían pruebas en la tienda y en la casa y el automóvil del atacante, a quien se negó a nombrar públicamente. Sin embargo, una portavoz de la ciudad lo identificó como Uk Thang, de 29 años.
El pistolero tenía antecedentes de algunos arrestos por delitos menores, «pero nada por violencia ni nada de eso», aseveró Lane.
Testigos añadieron que Thang se movió por la tienda disparando a la gente con un rifle de disparo rápido. Las autoridades afirmaron que lo encontraron muerto en la parte trasera de la tienda con una herida de bala que aparentemente fue autoinfligida.
Cuando se le preguntó qué podría haber provocado la ola de disparos, Lane dijo: «estamos obteniendo una imagen más clara de lo que sucedió, pero aún no estoy listo para publicar eso».
La violencia fue la última de una serie de tiroteos masivos mortales en el lugar de trabajo que han estallado en ciudades estadounidenses, cobrando decenas de vidas este año y dejando muchos heridos.
Diez personas murieron en marzo cuando un hombre armado abrió fuego en un supermercado King Soopers propiedad de Kroger Co en Boulder, Colorado.
Lane enunció que un ejercicio de entrenamiento de tiradores masivos para los socorristas del área el 4 de junio puede haber salvado vidas, en parte al brindar atención médica a las víctimas más rápidamente.
«No tengo ninguna duda de que ese entrenamiento nos sirvió bien ayer», dijo.
