TORONTO – Confiados en el talento y la salud de Max Scherzer después de un 2024 plagado de lesiones, los Toronto Blue Jays llegaron a un acuerdo con el tres veces ganador del premio Cy Young por un contrato de un año y 15,5 millones de dólares pendiente de un examen físico, según una fuente de la industria .
Una vez concretada, la contratación tacha el último elemento de la lista de tareas pendientes del club fuera de temporada: un lanzador abridor, después de que ya agregó a Anthony Santander y Andrés Giménez para profundizar la alineación, junto con Jeff Hoffman, Yimi García y Nick Sandlin para rehacer el bullpen.
La inminente contratación de Scherzer debería profundizar la rotación detrás de Kevin Gausman, José Berríos y Chris Bassitt, protegiendo contra cualquier posible regresión de Bowden Francis y al mismo tiempo abriendo la puerta a Yariel Rodríguez para un cambio al bullpen o a un rol de swing.
Existe cierto riesgo, por supuesto, al contratar al futuro candidato al Salón de la Fama, de 40 años, que viene de un mínimo de nueve aperturas en su carrera durante una difícil temporada 2024.
Scherzer estuvo en modo de recuperación desde el principio el año pasado recuperándose de una cirugía de diciembre de 2023 en una hernia de disco en la espalda, y luego tuvo otras dos estadías en la lista de lesionados por fatiga en el hombro derecho y una distensión en el tendón de la corva izquierdo.
Aún así, los Blue Jays se sienten lo suficientemente confiados en su recuperación como para apostar por el potencial que ofrece un Scherzer en forma, ya que incluso en medio de los desafíos físicos, registró una efectividad de 3.95 y un WHIP de 1.154 con 40 ponches en 43.1 entradas.
Las discusiones habían estado a fuego lento entre los Blue Jays y Scherzer, un ocho veces All-Star con una efectividad de 3.16 en 2,878 entradas de cara a la temporada número 18 de una carrera notable, durante algunas semanas, pero se aceleraron en los últimos días, lo que llevó al acuerdo del jueves por la tarde.
El mercado de abridores se ha reducido considerablemente a lo largo del invierno, con Corbin Burnes, en particular, y Max Fried, en menor medida mientras su precio se disparaba, entre los primeros objetivos de los Blue Jays.
Otras opciones que aún están disponibles en el mercado abierto incluyen al canadiense Nick Pivetta, Jack Flaherty, Andrew Heaney y José Quintana, mientras que Dylan Cease podría ser un candidato para canje si los Padres de San Diego buscan canjear al agente libre pendiente. Los Blue Jays optaron por la opción de corto plazo, de alto riesgo y alta recompensa en Scherzer.
No está claro si aún pueden realizar más adquisiciones de gran valor, pero el gerente general Ross Atkins insinuó que el equipo estaba en su presupuesto o cerca de él la semana pasada durante una llamada de Zoom para presentar a Santander, aunque agregó que aún podrían presentarse oportunidades para los propietarios.
Se supone, entonces, que el argumento comercial para tales posibilidades tendría que ser excepcionalmente sólido, ya que se cree que los Blue Jays están en el mercado, pero por debajo del segundo umbral del Impuesto al Equilibrio Competitivo de 271 millones de dólares. Eso puede dificultar la contratación de agentes libres como Pete Alonso y Alex Bregman, con quienes a menudo se relaciona a los Blue Jays.
Si ese es realmente el caso, la pregunta es si las incorporaciones que han hecho, junto con los jugadores que adquirieron durante la venta límite del verano pasado y el talento que ya tenían en casa, son suficientes para que puedan competir por un lugar en la postemporada después de un naufragio de 74-88 el año pasado.
En términos más generales, la cuestión del futuro de Vladimir Guerrero Jr. pronto saldrá a la luz cuando el primera base cuatro veces All-Star diga que no discutirá una extensión a largo plazo después del primer entrenamiento completo del equipo en la primavera el 18 de febrero.
