Madrid, 24 ene (EFE).- El líder socialista español, Pedro Sánchez, conversó hoy con el de Podemos, Pablo Iglesias, con quien acordó continuar hablando sobre la posibilidad de un cambio progresista para el Gobierno del país, si bien le insistió en hablar de política y no de puestos en un hipotético Ejecutivo.
Según informaron fuentes de ambos partidos, Sánchez e Iglesias conversaron cordialmente durante unos 20 minutos, tiempo en el que el secretario general de los socialistas expresó su desagrado por la forma en que el de Podemos (izquierda antiausteridad) expresó su propuesta de Gobierno el pasado viernes.
Ese día, Iglesias propuso públicamente un Gobierno de izquierdas, en el que el socialista Sánchez sería presidente y él vicepresidente, y en el que también quedaría incluida la coalición Unidad Popular.
En su conversación de hoy, el secretario general del PSOE se mostró partidario de esperar al mandato del rey Felipe VI tras la nueva ronda de consultas, que comenzará el miércoles 27, y expresó su «indignación» por el «uso partidista que de las instituciones» que a su juicio ha hecho el presidente del Gobierno en funciones y líder del PP (conservador), Mariano Rajoy.
Sánchez reiteró a Iglesias la «necesidad de hablar antes de las políticas que de los puestos» y recalcó su voluntad de conversar con todas las fuerzas políticas «que quieran un cambio progresista y reformista».
El líder de Podemos consideró por su parte que debe trabajarse «para un gobierno progresista de cambio plural y proporcional que apueste por políticas económicas redistributivas, por la plurinacionalidad y por el diálogo con las fuerzas que no comparten hoja de ruta con el PP» e insistió en la importancia de «no dilatar más el tiempo».
Sánchez, que el sábado también mantuvo una conversación con el líder de Ciudadanos (liberales), Albert Rivera, volverá a charlar esta semana con Iglesias, según acordaron hoy.
Los comicios generales del pasado 20 de diciembre dieron ganador al Partido Popular, con 123 escaños, por delante del PSOE (90), Podemos (69) y Ciudadanos (40).
Con la mayoría absoluta del Congreso fijada en 176 diputados la tarea de formar alianzas resulta complicada en un país poco acostumbrando a ese tipo de coyunturas políticas.
El panorama político español centra sus miradas en el secretario general socialista después de que este viernes Rajoy declinara por el momento la oferta del rey Felipe de someterse de nuevo a la investidura, tras constatar que carece de apoyos.
Felipe VI mantuvo durante cinco días una ronda de consultas con los líderes de todos los partidos políticos con representación parlamentaria, excepto dos formaciones nacionalistas que renunciaron a ello.
En esta ocasión, a partir del miércoles 27 el jefe del Estado español volverá a mantener encuentros con los responsables de las formaciones, tras los que deberá salir otra propuesta de candidato a jefe de Gobierno. EFE
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