La policía realizó varios arrestos este jueves por la noche mientras cientos de manifestantes del convoy, continuaban desafiando las demandas de que pusieran fin al bloqueo de semanas en la capital del país.
Los medios apreciaron, cómo los oficiales, se llevan esposado a uno de los principales organizadores de la protesta mientras la policía realizaba detenciones en las afueras de Parliament Hill. Uno de los compañero organizador del convoy, identificó al hombre arrestado como Chris Barber.
El Servicio de Policía de Ottawa dijo que no confirmarán los nombres de las personas arrestadas hasta que se presenten los cargos.
El jefe de policía interino, Steve Bell, dijo a los periodistas que los agentes locales, de la RCMP y de la policía provincial de Ontario aseguraron una gran área al sur de Parliament Hill, donde los manifestantes del convoy, causaron disturbios y caos durante las últimas tres semanas. La zona segura incluye casi 100 puntos de control y la policía evitará que más manifestantes ingresen al área.
“Queremos que la gente se vaya pacíficamente. Pero les puedo decir que, si no se van pacíficamente, tenemos planes, estrategias y tácticas para poder lograr que se vayan”, dijo el jefe Bell.
El jefe interino dijo que no podía decir cuándo la policía despejaría a todos los manifestantes, pero dijo que “este fin de semana habrá una imagen muy diferente del centro de la ciudad de lo que ha sido en los tres fines de semana anteriores”. La policía no ve “ningún problema con la capacidad de retirar vehículos en este momento”, dijo.
El día 21 del bloqueo estuvo húmedo y gris pero la fiesta continuó afuera de la Oficina del Primer Ministro. Se asaron perritos calientes y hamburguesas en barbacoas y un flujo constante de bidones llenos de combustible se dirigía a los camiones estacionados en el bloqueo. El jacuzzi inflable que se volvió viral durante el fin de semana también se encendió nuevamente con dos hombres sumergidos en la bañera cerca de la entrada de la Cámara de los Comunes.
Los manifestantes del convoy, se mantuvieron desafiantes a pesar de la fuerte presencia policial y después de recibir una advertencia de la policía para que se fueran de inmediato o se enfrentaran a graves consecuencias. La policía continuó entregando avisos a los manifestantes para que se fueran, mientras que los trabajadores de la ciudad colocaron cercas de metal a lo largo del muro de piedra frente a Parliament Hill y frente al Senado en preparación de la esperada acción policial.
Un funcionario del gobierno de Ontario calificó las medidas como una estrategia de «acordonar y despejar» que ha sido desarrollada por el centro de comando integrado que involucra a RCMP, la Policía Provincial de Ontario y la Policía de Ottawa. The Globe and Mail no identifica a la fuente que no estaba autorizada para discutir el asunto.
La policía provincial de Quebec también ha establecido su propio centro de mando en Gatineau, al otro lado del río desde Ottawa, para ayudar a poner fin a los 21 días de protestas que los líderes de la capital han calificado de ocupación.
Mientras tanto, dentro de la Cámara de los Comunes, los diputados debatieron la Ley de Emergencias. El primer ministro Justin Trudeau dijo que cuando los «bloqueos y ocupaciones ilegales» entraron en su tercera semana, el gobierno federal invocó la ley para proteger a las familias, las pequeñas empresas, los empleos y la economía, y porque la situación «no podía ser tratada bajo ninguna otra ley». en Canadá.» “Lo hicimos porque eso es lo que el liderazgo responsable requiere que hagamos”, dijo.
La líder interina conservadora Candice Bergen dijo que su partido cree que los camiones “deben moverse o ser movidos”. Sin embargo, dijo que mientras los conservadores quieren bajar la temperatura en todo el país, Trudeau “claramente quiere subirla”. Llamó a la decisión del Primer Ministro de presentar el acto como una «extralimitación» y dijo que «está mal». El líder del NDP, Jagmeet Singh, dijo que su partido retirará su apoyo para invocar la ley si en algún momento siente que se está haciendo un mal uso de los poderes.
Afuera, muchos manifestantes se atrincheraron. Wayne Harvey, de la Primera Nación Esgenoopetitj (también conocida como Iglesia Quemada) en New Brunswick, estacionó su RV para bloquear todos los carriles de tráfico en Sussex Drive, dirigiéndose hacia una de las intersecciones bloqueadas en el centro. . Lemas como «mantener la línea» y «unidos resistiremos» están garabateados en la caravana.
“La razón por la que estoy estacionado de esta manera, es protege a todos por dentro”, dijo. “Entonces, si viene la grúa, no pueden remolcarnos fácilmente”.
El Sr. Harvey dijo que vino a las protestas porque sintió que el Señor le insinuaba que debía unirse a ellas. Dijo que está en contra de las vacunas.
Starlene Robertson y su amiga Temple Heidecker de Spencerville, Ontario, han estado sentadas en un camión de media tonelada desde que comenzaron las protestas del convoy, el 28 de enero. La Sra. Robertson dijo que perdió su trabajo en una corporación federal de la Corona, que no quiso nombrar. , porque se negó a ser vacunada. Las dos mujeres dijeron que están dispuestas a ir a la cárcel para defender sus derechos.
“Tenemos libertad de conciencia en este país. Necesitamos respeto. Ahora en este país, estamos siendo separados. No apreciamos la discriminación”, dijo.
La Sra. Robertson dijo que permanecería en paz, pero que está dispuesta a que la arresten, le incauten su camión y le revoquen la licencia si eso es lo que se necesita. ¿Y que? “Supongo que tendré que conseguir un caballo”, dijo.
Miroslaw Fabinski, un camionero transfronterizo de Thornhill, Ontario, dijo que no cree que la policía tenga motivos para arrestarlo o acusarlo, pero que está dispuesto a correr el riesgo de todos modos. La policía ha advertido repetidamente a los manifestantes que, si los acusan, se les podría negar la entrada a Estados Unidos.
“Si vienen, que nos arresten… No me importa”, dijo. “Sé que estoy haciendo lo correcto”.
Pero dijo que sabe que está tomando un “gran riesgo” porque si lo acusan, es posible que solo pueda trabajar en Canadá, donde la conducción de camiones es menos lucrativa.
“Estoy bien con eso. Te lo dije, estoy de acuerdo con eso”, dijo.
En los últimos días, algunos manifestantes se han ido, en parte por el riesgo de perder su seguro y licencia comercial.
Robert Tyszkiewicz, que vive en Mississauga y condujo su camioneta de carga hasta el bloqueo, dijo el jueves que un conductor se fue porque le dijeron que perdería el seguro de un camión de la empresa. Pero el manifestante planea regresar con un vehículo personal.
Tyszkiewicz dijo que le dieron un ultimátum similar pero no se dejó intimidar.
“Quieren quitarme las placas y el seguro de mi auto”, dijo, “eso significa que estoy despedido”.
A pesar de perder su trabajo, dijo que no se arrepiente de unirse a las protestas y que ahora no tiene “nada que perder”.
Muchos manifestantes han impreso copias de la Declaración de Derechos de Canadá de 1960 y las han pegado en sus parachoques, parabrisas o puertas. Los manifestantes dijeron que no creen en las advertencias de los volantes emitidos por la policía y que no creen que puedan ser acusados por seguir participando en lo que las fuerzas del orden dicen que es una protesta ilegal.
