Canadá – El gigante automovilístico japonés Honda anunció el jueves la mayor inversión automovilística en la historia de Canadá, valorada en 15.000 millones de dólares canadienses (11.000 millones de dólares), para una enorme nueva planta de ensamblaje de vehículos y baterías para vehículos eléctricos.
El director ejecutivo de Honda, Toshihiro Mibe, dijo en una conferencia de prensa conjunta con el primer ministro Justin Trudeau y otros funcionarios que los vehículos eléctricos (EV) comenzarán a salir de la nueva línea de ensamblaje en 2028.
Una vez en pleno funcionamiento, la fábrica tendrá una capacidad de producción de 240.000 vehículos al año y una producción de baterías de 36 GWh al año.
«El mundo está cambiando rápidamente y debemos trabajar para lograr la neutralidad de carbono para sostener el medio ambiente global», dijo Mibe.
Honda estima que se crearán 1.000 nuevos puestos de trabajo en la instalación, que se construirá junto a sus plantas de ensamblaje Civic y CR-V existentes al norte de Toronto, que ya emplean a 4.200 trabajadores.
Trudeau elogió los esfuerzos de Ottawa para establecer «todo un ecosistema» en torno a la producción de baterías eléctricas, posicionando a Canadá como un destino atractivo para la inversión en vehículos eléctricos, con generosos incentivos fiscales, acceso a energías renovables y sus raros depósitos minerales.
«Debido a las decisiones que nuestro gobierno ha tomado en los últimos años, Canadá ahora ocupa el primer lugar a nivel mundial en el ranking de Bloomberg de cadenas de suministro de baterías de iones de litio», dijo Trudeau.
El primer ministro de Ontario, Doug Ford, señaló que su provincia es «el único lugar del mundo al que seis de los mayores fabricantes de automóviles llaman hogar» y que con la inversión de Honda ahora «lidera el mundo en la revolución de los vehículos eléctricos».
En el presupuesto federal la semana pasada, el gobierno de Trudeau introdujo un nuevo crédito fiscal empresarial, otorgando a las empresas un reembolso del 10 por ciento en los costos de construcción de nuevas instalaciones utilizadas en segmentos clave de la cadena de suministro de vehículos eléctricos.
El valor estimado del crédito fiscal federal para las nuevas instalaciones de Honda es de 2.500 millones de dólares canadienses, mientras que Ford dijo que la provincia está aportando otros 2.500 millones de dólares canadienses en incentivos.
