No hay nada que nos llene más de orgullo a los colombianos que celebrara nuestro día de independencia, sobre todo cuando una de las siete maravillas del mundo es iluminada con el amarillo, azul y rojo de nuestra bandera, como ocurrió el pasado 20 de julio en las Cataratas del Niágara, pero al parecer a muchos de nuestros paisanos ese orgullo patrio desbordado les hizo olvidar que vivimos en el país de las reglas, donde el gobierno a implanto comportamiento sociales de reglas de distanciamiento y uso obligatorio de tapabocas para prevenir la propagación del COVID-19.
Ni siquiera en nuestro país, golpeado severamente por la pandemia y donde le hacemos la fiesta a un tinto hubo motivos para celebrar. Colombia, nuestra amada tierra, se ubica hoy en la lista de países con el mayor número de contagios y víctimas a nivel mundial en el puesto 13, con un total de 216.428 casos y un total de 7,373 muertos.
A pesar que el gobierno colombiano ha impuesto una cuarentena severa y una de las más extensas del continente, el virus no se detiene en el país y no es porque las medidas no funcionan, es porque los mismos ciudadanos no respetan o ignoran las reglas sanitarias implementadas por el gobierno como el distanciamiento social y el uso obligatorio de tapabocas en lugares públicos. Eso mismo ocurrió en las Cataratas del Niágara el pasado 20 de julio cuando cientos de colombianos se aglomeraron de manera folclórica, frente a esta belleza natural para celebrar el orgullo patrio olvidando por completo las reglas.
El comportamiento social de los colombianos en Niagara, fue duramente criticado por las autoridades de la región como lo confirmó el jefe regional, Jim Bradley, a la cadena de noticias CHCH news. El funcionario mostró preocupación por el comportamiento mostrado por los colombianos que llegaron en masa a las cataratas para celebrar el día de la independencia. Bradley invitó a las personas a disfrutar de la región, pero respetando las reglas para evitar la propagación del COVID-19.
Tal vez es momento de que nuestros paisanos tengan una reflexión sobre el comportamiento social mostrado en las Cataratas del Niágara en medio de la pandemia. Los colombianos somos mirados en Canadá como gente trabajadora, educada y con una preparación académica de alto nivel, pero comportamientos sociales como los mostrados en Niagara empañan un poco esa imagen en este país.
Es increíble disfrutar de la fiesta patria con amigos y ponerse la camiseta de nuestra selección y mover la bandera tricolor para mostrar nuestro orgullo de ser colombiano, como se vio en cientos de videos en las redes sociales, pero no hay que rayar en el extremo y ser criticado por irrespetar las reglas de comportamiento social de Ontario en tiempos del COVID-19.
Sería bueno conocer la opinión de Jorge Alfredo Díaz Bravo, cónsul de Colombia en Toronto acerca de lo acontecido en las Cataratas del Niágara el 20 de julio.
