
Saná, 10 feb (EFE).- El líder del movimiento rebelde chií de los hutíes, Abdelmalek al Huti, acusó hoy a Estados Unidos y otros países de querer desestabilizar el Yemen después de que su grupo tomara el control del país.
En una alocución televisada y grabada desde su bastión de la remota provincia de Saada, fronteriza con Arabia Saudí y ubicada en el noroeste del Yemen, Al Huti destacó que hay fuerzas políticas yemeníes adversarias y países que pretenden «sembrar el caos» en el país.
Asimismo, alertó de que «quien apuesta por perjudicar la economía o la seguridad de este pueblo (yemení) verá cómo sus intereses están en peligro».
Entre los países con intereses en Yemen, el líder del movimiento chií citó a las monarquías del golfo Pérsico, a EEUU, a Francia y al Reino Unido.
Además, insistió en que «es interés de todas las fuerzas dentro y fuera que este país esté estable».
El pasado sábado, Al Huti pronunció otro discurso en el que defendió la disolución del Parlamento y la próxima formación de un Consejo Presidencial transitorio decretadas por los hutíes para llenar el vacío de poder tras la dimisión en enero del presidente del país, Abdo Rabu Mansur Hadi, y el Gobierno.
Hadi dimitió por las presiones recibidas por los rebeldes chiíes, que en los últimos meses han ocupado edificios gubernamentales y palacios presidenciales en Saná, mientras que han extendido su dominio a siete regiones.
Precisamente hoy, una fuente de la embajada estadounidense en la capital yemení informó a Efe del cierre de esa legación de forma definitiva ante la crisis política desatada.
Mientras que la ONU ha llamado a restablecer a las autoridades legítimas, las monarquías suníes del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) han acusado a los hutíes de dar «un golpe de Estado» que «destruye el proceso político pacífico» iniciado tras la caída del presidente yemení, Ali Abdalá Saleh, en 2012.