El primer ministro Justin Trudeau ingresa al primer día de la cumbre del G7 como el único líder que aún no ha prometido cuántas dosis de vacunas donará su país a las naciones menos ricas.
El Reino Unido asegura que se espera que los líderes acuerden dar a otras partes del mundo acceso a mil millones de dosis de vacunas COVID-19 a través de donaciones y financiamiento.
Trudeau se reunirá con el primer ministro británico Boris Johnson, quien ha declarado que quiere que la reunión de tres días produzca promesas sobre formas de poner fin a la pandemia para fines del próximo año.
Los líderes del G7 participarán hoy en una sesión que se centra en cómo la recuperación económica y de salud de COVID puede ser «para todos».
Garantizar el acceso equitativo a las vacunas contra COVID-19 es un llamado al que se enfrentan los líderes de la Organización Mundial de la Salud, así como los grupos humanitarios y de lucha contra la pobreza, ya que más del 80% de las vacunas hasta la fecha han sido en países ricos.
Aunque Canadá aún tiene que explicar sus planes para la donación de vacunas, ha prometido que $440 millones se destinarán a COVAX, una iniciativa de intercambio de vacunas para comprar dosis directamente de los fabricantes y dárselas a países de ingresos bajos y medianos.
Canadá ha tenido una experiencia mixta con el acceso a las vacunas. Los envíos al país tuvieron un comienzo lento en enero y febrero, a lo que siguió una tercera ola mortal del virus, pero ha aumentado esta primavera.
Esta semana, Canadá anunció que recibiría otros siete millones de dosis de vacuna de Moderna en junio. La ministra de Adquisiciones, Anita Anand, dijo que debería haber suficiente vacuna entregada para que el 80 por ciento de los canadienses elegibles estén completamente vacunados a fines de julio.
