
La Liga de España ingresó en su recta final y el Barcelona se trazó la meta de ganar cuanto antes la competencia para así «liberarse» y poder encarar con tranquilidad la final de la Copa del Rey (enfrentará a Valencia) y los cuartos de final de la Champions League (se medirá ante Manchester United).
Los catalanes, a falta de 9 partidos y con 69 unidades, lideran la competencia con 7 puntos de ventaja por sobre Atlético Madrid (que hoy venció al Girona) y le saca 12 al Real Madrid. Este martes en el Estadio de las Cerámicas, visita a un Villarreal que necesita sumar para eludir el descenso. Con 29 puntos aparece solamente a uno de Celta de Viga, último equipo en caer en la zona roja de la tabla de posiciones.
El partido se abrió a los 12 minutos en la primera llegada del elenco visitante. Malcom picó al vacío por derecha, aprovechando la defensa abierta del local, entró al área y asistió a Philippe Coutinho que apareció como centrodelantero para empujar el balón a gol. Cuatro minutos más tarde, nuevamente el extremo sería protagonista de uno de los tanto, pero esta vez el rol de asistidor lo ocupó Arturo Vidal con un centro al segundo palo perfecto para que el brasileño cabeceé sólo al palo más lejano.
El descuento del Villarreal llegó a los 23 minutos gracias a una jugada individual de Samuel Chukwueze que primero definió al palo y luego sí pudo marcar al aprovechar el rebote. Tras ese grito, el elenco local pudo haber igualado el marcador en algún intento, pero no estuvo fino en la definición.
Para sorpresa del equipo de Ernesto Valverde, el local llegó al empate en la primera acción del complemento. A los cinco minutos Ekambi desbordó por derecha, llegó hasta el fondo y cuando quiso lanzar el centro atrás terminó gritando el empate. El esférico se filtró entre Ter Stegen y el primer palo para el 2-2 que desató la locura en el Estadio de la Cerámica.
Inmediatamente después, el entrenador mandó a la cancha a Lionel Messi, en lugar de Coutinho, para que salve a su equipo, pero el Villarreal gritó el tercero. Un pase filtrado encontró a la defensa del Barcelona en línea y estática, y a Iborra dispuesto para correr al vacío y definir cruzado para estampar el 3 a 2.
Como si esto fuera poco, el Villarreal aprovechó un nuevo error defensivo del Barcelona y el colombiano Bacca escapó mano a mano, eludió a Ter Stegen y festejó el 4 a 2 que parecía sentenciar el duelo a los 35 minutos del complemento.
Cuando quedaban cuatro minutos para el cierre, Álvaro González vio la doble tarjeta roja -por doble amarilla- y dejó al «Submarino Amarillo» con 10 jugadores, situación que inclinó la balanza en favor del cuadro catalán que ahora tenía dos rivales: el Villarreal y el tiempo.
A los 90, Lionel Messi definió un tiro libre con un potente zurdazo que se clavó en el ángulo superior derecho del arco defendido por Sergio Asenjo y estableció el 4-3; en el tercer minuto de adición el argentino ejecutó un tiro de esquina al segundo palo que encontró una volea espectacular de Luis Suárez en el borde del área grande que se coló abajo, contra el poste izquierdo y sentenció el 4-4 final.