
México, 18 sep (EFE).- El presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, visitó hoy a los seis heridos que se encuentran internados en un hospital de la capital mexicana, después de que fueran repatriados desde Egipto, donde sufrieron un ataque de las fuerzas de seguridad.
Frente a las puertas del Instituto Nacional de Rehabilitación, el mandatario dijo a la prensa que los seis se encuentran «muy conscientes», con quemaduras y fracturas de distintos grados y que pudo hablar con todos ellos sobre lo sucedido.
Peña Nieto estuvo acompañado de las secretarias de Salud, Mercedes Juan, y de Relaciones Exteriores, Claudia Ruiz Massieu, quien regresó hoy en el avión presidencial con los heridos y algunos de los familiares de los ocho fallecidos en el ataque aéreo.
Precisó que uno de los heridos, Juan Pablo, le relató cómo sucedieron los hechos, cómo sucedió el ataque con bombas lanzando por fuerzas de seguridad egipcias, que los confundieron con terroristas cuando estaban cerca del oasis de Bahareya, en el desierto occidental.
El mandatario explicó que les ha comunicado lo mismo que esta mañana compartió a sus familiares y a los de los fallecidos en un encuentro privado celebrado en la residencia presidencial de Los Pinos.
El Gobierno, dijo, seguirá adelante con su «protesta enérgica» para que se lleve a cabo «una investigación profunda de este caso» y se den «las garantías necesarias para la reparación del daño a las víctimas».
Además, acompañará a las familias en el proceso legal para reclamar sus derechos ante el Ejecutivo egipcio, señaló.
Peña Nieto precisó que los seis pacientes se encuentran «bien atendidos» y que espera que «pronto puedan abandonar la hospitalización y regresar a sus casas».
Sobre la repatriación de los cuerpos de los fallecidos, confió en que se pueda llevar a cabo «en algún momento de la próxima semana», ya que permanecen en Egipto por «normas del derecho internacional» para «los efectos de las prácticas de orden pericial que deban llevarse a cabo».