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http://www.eltiempo.com/ El presidente paraguayo, Horacio Cartes, dio comienzo este miércoles a la mesa de diálogo que convocó tras las violentas protestas contra la reelección presidencial, y a la que no asistió el Partido Liberal, el mayor de la oposición, que comunicó que no se sentaría en ese foro hasta que se retire el polémico proyecto.
A la mesa, que se celebra a puerta cerrada en el Seminario Metropolitano, acudieron el presidente de Senadores, Roberto Acevedo, de Diputados, Hugo Velázquez, y el arzobispo de Asunción, Edmundo Valenzuela, en representación de la Iglesia local. También los líderes de los partidos políticos con representación parlamentaría, como el Frente Guasú, del expresidente Fernando Lugo, y del gobernante Partido Colorado.
La gran excepción fue Efraín Alegre, presidente del Partido Liberal, quien anoche envió una misiva a Cartes anunciando que no estaría en esa mesa al no darse las condiciones para un diálogo.
Alegre puso como condición para su participación la retirada del proyecto de enmienda que fue aprobado por 25 senadores para facultar la reelección presidencial, que desencadenó la ola de violencia del pasado viernes.
La iniciativa Cartes surgió tras los hechos de violencia registrados en las afueras del Congreso, que fue parcialmente incendiado por algunos manifestantes y la Policía hirió con balas de goma a varias personas. Horas después la Policía invadió la sede del Partido Liberal, donde murió Quintana, presuntamente por el disparo de un policía que ya ha sido detenido.