
El líder de Corea del Norte Kim Jong Un se reunió este jueves con el presidente de Rusia, Vladimir Putin, en la ciudad rusa de Vladivostok.
El primer encuentro entre ambos mandatarios se produce dos meses después de que las conversaciones entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y Kim en Vietnam terminaran abruptamente sin un acuerdo.
Kim dijo que su visita a Rusia para una cumbre de dos días era “una gran alegría”.
Tras la primera cumbre entre el presidente de Rusia y el líder del régimen norcoreano, Vladimir Putin afirmó que está dispuesto a cooperar para el desarme nuclear de la península.
Corea del Norte necesita «garantías sobre su seguridad, la preservación de su soberanía», dijo Putin tras reunirse con el líder norcoreano Kim Jong-un en Vladivostok, en el Extremo Oriente de Rusia.
«Necesitamos restaurar el poder del derecho internacional, volver al estado en el que el derecho internacional, y no la ley del más fuerte, determina la situación en el mundo», agregó.
Putin señaló que discutiría con Washington sobre lo hablado con Kim.
«Aquí no hay secretos, no hay conspiraciones. El propio presidente Kim nos pidió informar al lado estadounidense sobre nuestra posición», precisó.
El presidente ruso aseguró que los intereses de su país coinciden con los de Estados Unidos en el sentido en que ambos están a favor de una «completa desnuclearización».
«En cuanto a lo concerniente a la reducción de la amenaza de conflictos nucleares, ésta es ciertamente una prioridad común», dijo.
“Discutimos sobre la situación en la península de Corea. Intercambiamos opiniones sobre qué y cómo se debe hacer para que la situación tenga una gran perspectiva de mejora”, dijo el líder ruso.
Putin dijo que creía que la visita de Kim ayudaría “a nuestras relaciones bilaterales y nos ayudará a comprender las formas en que podemos colaborar para resolver la situación en la península de Corea, qué podemos hacer juntos, qué puede hacer Rusia para apoyar los procesos positivos que están teniendo lugar ahora”.
Algunos analistas creen que la reunión de Putin con Kim es una especie de golpe de estado, luego del colapso de la cumbre de Vietnam con Trump y el estado actual de las conversaciones entre Corea del Norte y Estados Unidos.
«Tuve la impresión de que el líder norcoreano comparte el mismo punto de vista. Y necesitamos garantías de seguridad, es todo. Necesitamos pensar sobre esto todos juntos», concluyó.