
La paz de la aldea de Vorizia, en la isla griega de Creta, se vio abruptamente interrumpida este fin de semana tras un violento tiroteo que dejó un saldo de dos personas muertas y al menos diez heridas, entre ellas varios vecinos del lugar. El hecho ha sido descrito por las autoridades locales como parte de una disputa familiar de larga data, una vendetta que volvió a despertar viejos resentimientos en esta región del sur de Grecia.
El incidente ocurrió en la madrugada del sábado, cuando un grupo armado abrió fuego en una zona residencial del pequeño pueblo, ubicado al pie del monte Psiloritis, cerca de Heraklion. Testigos aseguran que los disparos se escucharon durante varios minutos y que varias viviendas y automóviles resultaron impactados. Los servicios de emergencia acudieron rápidamente al lugar para evacuar a los heridos y trasladarlos a hospitales cercanos, mientras la policía acordonaba el área.
Según fuentes policiales citadas por medios griegos, el ataque estaría vinculado a una explosión ocurrida la noche anterior en un edificio en construcción, propiedad de una de las familias implicadas en la disputa. Las autoridades investigan si ambos sucesos forman parte de una serie de represalias derivadas de antiguos conflictos por tierras o herencias, un fenómeno que aún persiste en ciertas zonas rurales de Creta.
El gobierno griego calificó el hecho como “una tragedia inaceptable” y envió refuerzos policiales desde Heraklion para garantizar la seguridad en la región. “No podemos permitir que las tradiciones de violencia empañen la imagen de una isla conocida por su hospitalidad”, declaró un portavoz del Ministerio del Interior.
El tiroteo ha causado conmoción entre los habitantes de Vorizia, una comunidad de apenas unos cientos de residentes, y ha generado preocupación en el sector turístico de Creta, una de las principales fuentes de ingreso de Grecia. Mientras continúan las investigaciones, las autoridades hacen un llamado a la calma y piden colaboración ciudadana para esclarecer lo ocurrido y evitar una nueva escalada de violencia.
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