
La municipalidad de Villa Nueva, la localidad guatemalteca en donde el martes pasado se produjo un derrumbe que causó un total de 11 muertos, informó hoy que denunciará por homicidio culposo al propietario del terreno que se deslizó.
Así lo anunció este viernes el alcalde de Villa Nueva, Edwin Escobar, que presentó un informe sobre la catástrofe en la que murieron 11 personas, cifra definitiva de víctimas tras haber sido hallado este viernes el cuerpo de un menor, el único desaparecido.
La municipalidad identificó como Ángel A.C. al propietario del terreno donde se estacionaban vehículos pesados y que el martes pasado sufrió un «colapso estructural» a causa de las lluvias y la deficiencia de la construcción.
El derrumbe afectó al asentamiento Santa Isabel II, ubicado junto al río Platanitos y creado en el 2006 cuando el terreno, que pertenecía a la Unidad de Desarrollo de Vivienda Popular (Unedipo), fue invadido por los pobladores.
Tras el derrumbe, las autoridades locales habilitaron un albergue para los afectados, así como un centro de acopio con ayudas como ropa, alimentos y medicamentos.
Según los últimos datos oficiales, sin contar la tragedia en Santa Isabel II, la temporada de lluvias iniciada en mayo pasado ha provocado 141 incidentes, 173.685 afectados, 1.466 damnificados, 2.293 evacuados, 903 albergados, 6 heridos y dos muertos, además de daños a más de 2.000 viviendas.
Solo en el área metropolitana de Guatemala hay 232 asentamientos considerados «de riesgo» al estar ubicados en laderas o barrancos, y se calcula que en ellos viven unas 300.000 personas.
El 1 de octubre del año pasado un deslizamiento de tierra causó 280 muertos y 70 desaparecidos en El Cambray II, en el municipio de Santa Catarina Pinula, en el sureste de Guatemala.
El país, según las Naciones Unidas, es uno de los más vulnerables a los efectos del cambio climático. Guatemala, 9 sep (EFE).-