
San Salvador, 28 abr (EFE).- Los querellantes en el proceso que se sigue contra el expresidente salvadoreño Francisco Flores (1999-2004) por presunta corrupción dijeron hoy que el Banco Cuscatlán de Costa Rica «pudo haber violado» normativas nacionales e internacionales «sobre lavado de dinero».
«Nuestra valoración preliminar es que el banco pudo haber violado todos los protocolos internos, manuales de procedimientos y normativa nacional de Costa Rica e internacionales sobre lavado de dinero, sin que haya mediado ninguna investigación a cargo de la Fiscalía de Costa Rica para deducir responsabilidades», señalaron los querellantes en un comunicado.
Agregaron que la Fiscalía de ese país «negó el acceso al perito financiero nombrado por la Superintendencia del Sistema Financiero de El Salvador para poder revisar contratos, registros de firmas, estados de cuentas, declaraciones juradas (…) a cargo del Citi Bank de Costa Rica amparados en el secreto bancario».
La nota detalla que dicho banco «absorbió al Banco Cuscatlán» donde se abrieron cuentas al «Instituto Rodríguez Port con cheques a nombre de expresidente Francisco Flores» de donativos por el Gobierno China Taiwán a El Salvador.
Los querellantes de las organizaciones Iniciativa Social para la Democracia (ISD) y la Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (FESPAD) realizaron un «proceso de entrevistas a los ejecutivos del ex Banco Cuscatlán de Costa Rica» junto con la Fiscalía de ese país.
Los mismos señalaron que la Fiscalía costarricense «ha tenido bajo perfil en los interrogatorios» a pesar de estar acompañados por «dos expertos en temas financieros y sobre lavado de dinero».
«Las jornadas de entrevistas han tenido una duración aproximada de 5 horas cada una y son dirigidas por un Fiscal designado por el Ministerio Público de Costa Rica» y continuarán el 29 de abril, concluye la misiva.
Flores fue acusado por la Fiscalía salvadoreña, el 30 de abril de 2014, de peculado y enriquecimiento ilícito por apropiación de 15 millones de dólares procedentes de Taiwán para proyectos de reconstrucción en El Salvador, tras los terremotos que asolaron el país en 2001.
Además, la Fiscalía lo acusó por desobediencia al no comparecer ante una comisión legislativa a la que había sido citado.
Por otra parte, un informe de una comisión especial de la Asamblea Legislativa, que carece de poder judicial, involucra a Flores en la supuesta apropiación de unos 70 millones de dólares procedentes del país asiático.
El expresidente Flores, que gobernó El Salvador por la opositora Alianza Republicana Nacionalista (ARENA), permanecerá en arresto domiciliario al menos hasta el 6 de mayo próximo, cuando vence el período de instrucción.