
Miembros del sindicato de aduanas e inmigración protestaron esta semana, y se declararon en operación tortuga como forma de presión para conseguir una mejora salarial y de contratación.
Ellos no han realizado ningún acuerdo ni han obtenido un aumento salarial por dos años y medio, dijo Jason McMichael, primer Vicepresidente de la Unión, quien marchó con los 35 miembros del sindicato en el punto Edward.
Después de un verano sin conversaciones o negociaciones puso en marcha la operación tortuga esta semana.
«Hemos pasado las últimas 48 horas, más o menos, en la mesa de negociación con muy poco o ningún movimiento por parte del empleador. Y desde nuestra perspectiva tampoco sentimos mucho respeto de parte del empleador» dijo McMichael.
Dijo que cuando los miembros del sindicato escuchen lo que está ofreciendo el gobierno en la mesa, «van a estar furiosos.»
Portando carteles y pancartas, los miembros de la Unión marcharon desde el estacionamiento del Hotel a la plaza, cruzando delante de las cabinas de inspección de camiones y luego en el vestíbulo de la aduana, donde McMichael habló brevemente.
McMichael dijo que la Unión sólo quiere lo mismo que han logrado otros 26 sindicatos federales en la negociación en sus nuevos contratos.
«Somos la única unidad de negociación dentro de la Junta del tesoro que no ha obtenido una solución a sus peticiones», dijo.
«Vamos a hacer algo de ruido, vamos a enviar un mensaje».
Hasta el momento el paro escalonado en las oficinas de inmigración de London no han registrado grandes retrasos en procesos pero los residentes en espera para la ceremonia de inmigración temen que se retrasen las ceremonias debido al paro.