
OTTAWA, Canadá. – En una sorpresa positiva que desestimó las sombrías predicciones de los economistas, la economía canadiense logró evitar lo que habría sido una recesión técnica al registrar un robusto crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB) en el tercer trimestre de 2025. El crecimiento anualizado se situó en un impresionante 2.6%, revirtiendo drásticamente la contracción observada en el trimestre anterior y superando con creces las expectativas del mercado y del Banco de Canadá.
El resultado es particularmente significativo ya que la economía se había contraído un 1.8% anualizado en el segundo trimestre. Tradicionalmente, dos trimestres consecutivos de contracción definen una recesión técnica.
El Motor del Crecimiento: Comercio y Gasto Público
El inesperado impulso se debió principalmente a un fortalecimiento de la balanza comercial y un incremento en el gasto gubernamental.
Comercio: El factor clave fue la mayor caída de las importaciones desde 2022 (una disminución del 2.2%), combinada con un ligero aumento en las exportaciones. La reducción en la factura de importación fue el principal catalizador que impulsó el crecimiento general.
Gasto de Capital: La inversión de capital del gobierno fue notable, impulsada por un aumento sustancial del 82% en los desembolsos de sistemas de armas, lo que subraya el compromiso del país con los objetivos de gasto establecidos por la OTAN.
Señales de Alerta en el Consumo
A pesar de las cifras positivas del PIB, el informe de Statistics Canadá reveló indicadores de debilidad subyacente. Tanto el consumo de los hogares como el gasto general del gobierno disminuyeron ligeramente, lo que sugiere que la presión de las altas tasas de interés y la inflación continúa afectando la confianza y el poder adquisitivo de los canadienses. La inversión empresarial también se mantuvo estable, sin mostrar un crecimiento robusto.
El Banco de Canadá, que había pronosticado un crecimiento mucho más modesto del 0.5% para el tercer trimestre, ahora enfrenta una perspectiva más compleja. La solidez del PIB podría darles margen para mantener la tasa de interés de referencia en su nivel actual de 2.25%, pero la disminución del consumo interno mantendrá a los analistas cautelosos sobre el pronóstico para el último trimestre del año.






