Caracas, 11 de septiembre. — El presidente Nicolás Maduro anunció este jueves el inicio de la operación militar denominada “Independencia 200”, un despliegue nacional de “resistencia armada” que, según aseguró, busca responder a la “amenaza” que representa la reciente movilización de tropas y buques estadounidenses en el mar Caribe.
La maniobra se activó en 284 frentes de batalla en todo el país y, de acuerdo con Maduro, se organizó en menos de cinco horas. Aunque no especificó la cantidad de soldados involucrados, aseguró que la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) tomó posiciones en áreas estratégicas, incluidas instalaciones petroleras, aeropuertos, servicios públicos y fronteras.
“Que nadie dude. Dudar es traición. Quienes pidan invasión que lo hagan públicamente, y quienes vamos a defender la patria, a prepararnos para la máxima presión, máxima unión y máxima preparación”, declaró el mandatario durante un acto con delegados del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV).
Contexto regional
Estados Unidos desplegó recientemente ocho buques de guerra en el Caribe sur, argumentando que la misión está dirigida contra el narcotráfico internacional. Sin embargo, Caracas lo interpreta como un acto de hostilidad directa. “Venezuela no agrede a nadie, pero no acepta amenazas de agresión”, dijo Maduro, al tiempo que ordenó a alcaldes y gobernadores coordinarse con la FANB para controlar progresivamente 260.000 calles en 47.000 comunidades del país.
El despliegue ocurre tras un incidente ocurrido semanas atrás, cuando fuerzas estadounidenses destruyeron una lancha que, según Washington, transportaba “narcoterroristas” desde Venezuela. El hecho dejó 11 muertos y tensó aún más las relaciones.
En respuesta, aviones venezolanos sobrevolaron uno de los buques estadounidenses. El entonces presidente Donald Trump advirtió que cualquier amenaza sería neutralizada, e incrementó el despliegue aéreo en Puerto Rico.
Voces del oficialismo
El ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, confirmó que el operativo cubre áreas sensibles como refinerías y zonas costeras. Por su parte, el dirigente Diosdado Cabello negó las acusaciones de Washington que vinculaban a los abatidos en la operación estadounidense con la banda criminal Tren de Aragua, calificándolas de “falsas y manipuladas”.
Maduro, que la semana pasada había bajado el tono y llamado al diálogo, volvió ahora a reforzar su discurso bélico y convocó a la Milicia Bolivariana, integrada por civiles, a sumarse a la defensa nacional.
“Toda la capacidad de fuego de la FANB está en posición, defendiendo al país”, insistió el jefe de Estado, subrayando que Venezuela se prepara para resistir lo que calificó como un “asedio disfrazado de lucha antidrogas”.
